Un Caballero Rudo» MewGulf 🔞

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Mew toma un baño, absorto y cabizbajo. Pensando en el sentimiento tan bonito que experimentó en la cama con Gulf. La tersa clemencia del moreno, el entrelazo de dedos y el ósculo acaramelado.

Al salir de la bañera recibe una llamada. Él vuelve a encender la ducha para que la llamada no abandone las cuatro paredes. -Aló. Copper. ¿Cómo estás?

-Mm. Todo bien. Extrañándote. ¿Puedes venir hoy? He tenido un mal día y me sentaría bien un castigo.

-No te hicieron nada grave, ¿verdad?

-No. Nada de eso, Mew. Sólo te extraño.

-Temo que no podré verte hasta mañana, Copper.

-Qué raro. Jamás me habías rechazado antes. ¿Tienes otro cliente?

Cree disimularlo, pero los celos no pueden disfrazarse.-Sí. Nos veremos mañana, Cop. Cuídate.

-... Sólo no vayas a reemplazarme. Nos vemos, Mew.

Mew cuelga y le echa un vistazo a su reflejo en el espejo. -Dios. Espero que no se enoje demasiado. - Murmura.

Sale a la habitación, encontrando a Gulf plácidamente dormido. Lo ve encogido de hombros, sonriéndole a las imágenes en su cabeza. Mew se acerca, lo acobija hasta los hombros y lo abraza desde atrás. Protegiéndolo de cualquier duda o inseguridad. Brindándole la experiencia completa de un acompañante amoroso.

•••

Korn y Blue regresan a la heladería dónde se ubica el auto de Korn. Blue estaciona el coche frente al de Korn. -Gracias por regresarme.

-No lo agradezcas. Dile al estúpido de mi hermano que coja las llamadas. Para algo tiene teléfono.

-Él está ocupado.

-Suenas tan seguro que me da lástima. Ese fracasado ve animes como si viviera en un mundo de fantasía.

-¡Ya deja de hablar así de él! ¿Acaso recuerdas lo que hizo por ti?

-Oh, sí, mi gran salvador. Bravo hermano, salvó a un futuro Juez de la drogadicción.

-El ojete del padre del que saliste. Gulf es todo lo que tú nunca serás.

-Sal de mi auto.

Korn sale del auto y camina hacia el suyo. Pero mientras se acerca siente el miedo acapararlo. El miedo crece como una sombra y se incrusta en sus huesos. Queda perplejo frente a la puerta. Revisa que no haya nadie en los asientos traseros. Pero aún sin ver nada se siente inseguro.

-¿Estás bien? - Escucha a Blue preguntar.

-Honestamente no-

Blue se retira sin más, alejando las luces de él. -¡MALDITO ASNO! - Korn le grita con todo su ser. Hasta quedar en la oscuridad. Él se mete al auto veloz y respira con dificultad antes de mirar los asientos traseros. No hay nada. El peligro no está ahí. Está afuera. -Llamaré a Gulf mañana. No quiero interrumpirlo ahora. - Él murmura.

•••

Al otro día, Gulf despierta. Frota sus ojos y busca a Mew, pero no lo encuentra. Ve una nota en la mesa, pero antes de leer se coloca los anteojos: -'Encontré waffles en la cocina y te hice el desayuno. Espero que hayas descansado y para hablar de los documentos o alguna otra cosa escríbeme al número de abajo. Posdata: Eres asombroso. '

Gulf se sonroja y cubierto por la sábana, camina hasta la cocina donde el microondas tiene otro post it con el dibujo de un corazón. Lo abre y hace que los dedos de sus pies se toquen al ver la comida. Waffles con huevos fritos y tocinos. -Qué mal que hoy no me levanté temprano. Pero aún así me lo comeré. Gracias, Mew. - Gulf saca el plato del microondas, se sirve jugo y baña los waffles en sirope. Dándole un plácido mordisco.