《 CAPÍTULO. 13 》

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Hoseok.

Los siguientes días a mi recuperación fueron en su mayoria tristes y solitarios, había sido un tonto al pensar que mi embarazo me uniría mucho más a Jungkook.

Sin embargo, lo único que consegui fui alejarlo lo suficiente como para no soportar respirar el mismo aire.

¿Que se supone que deba hacer ahora? ¿Que hago con este dolor que me quema por dentro y desgarra mi alma?.

He tratado de entenderlo, no dejarme arrastrar por los malos pensamientos que invaden mi mente, pero no encuentro una razón lógica que me ayude a entender su rechazo a los bebés.

Jungkook tiró mis sueños a la basura y mató mis ilusiones, pero no acabo con mis fuerzas y mis ganas de tener y cuidar a estos bebés, quizás fue muy apresurado y eso le aterró.

Es normal que sienta miedo, también estoy asustado, vivimos un mundo lleno de hipocresía rodeado de violencia y gente prejuiciosa, en una sociedad de mierda que lo cuestiona todo.

Aquello no es lo que realmente me preocupa, el hecho de estar solo lo hace, la indiferencia de Jungkook y su distanciamiento me mantiene en constante agonia, el dolor y el vacío que siento es cada vez más grande.

Duele sentirse rechazado.

Tuve el vago pensamiento qué, si le daba algo de tiempo a solas podría asimilar la noticia y cambiar su actitud, que volveriamos a ser los de antes pero veo que me equivoque.

Los días pasan y las cosas entre nosotros parecen ir de mal en peor, casi no hablamos y nos vemos cuando es estrictamente necesario.

Y duele, duele su indiferencia, su frialdad.

Siento que las cosas se dañaron en algún punto, lo que me llevo a replantear nuestra relación llegando a la conclusión que uno de nosotros no se esta tomando las cosas en serio o quizás nunca lo hizo para empezar.

Si no hubiera quedado en gestación las cosas entre nosotros seguirian siendo igual, viviríamos sumergidos en el deseo y la lujuria que arraza nuestros cuerpos, seguiríamos sin comunicarnos y en un par de años las cosas acabarian entre nosotros.

Quizá sea mi culpa por no hablar del tema y prevenir este embarazo, sin embargo, no me arrepiento de nada, estos bebés que crecen dentro de mi forman parte de mi vida, no conozco sus caras pero siento que los amo más que a mi propia vida, estoy dispuesto a morir por ellos de ser necesario.

Limpio la humedad que continúa deslizandose por mis mejillas, estos dias aqui no he hecho más que llorar y lamentarme de mi suerte, pero he decidido que ya no más.

Sorbo por la nariz paseando la vista por la ciudad, el sol se a ido, la lluvia cae a cántaros provocando que haga un frio del demonio.

Escucho el suave picoteo contra la puerta lo que me obliga a mirar por encima del hombro, Namjoon asoma la cabeza por el marco antes de entrar.

_ ¿Como estás Hoseok?- Inquiere con voz suave y cierta preocupación que no paso desapercibida, sus pasos indican lo cerca que está de mi- ¿Quieres hablar conmigo de cómo te sientes?.

Me confunde su acercamiento tan repentino, desde que puse un pie en la mansión Namjoon se encargo de ser todo un hijo de puta conmigo, ¿Que le hace pensar que me abrire tan fácilmente a él?.

Siento el peso de su mirada en mi espalda, Namjoon guarda silencio esperando una respuesta que llega segundos después.

_ Estoy bien, Namjoon.

_ No, no lo estás- Con pasos firmes se acerca hasta sujetar mis hombros y darme vuelta, su agarre es fuerte y lo suficiente cuidadoso para no lastimarme- ¡Mírame, Hobi! ¡Mírame!.

ERES MIO_ JUNGHOPEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora