Lord Potter Black

La Tension Entre los Campeones

El éxito en la primera prueba no fue recibido sin controversia. La tensión entre los campeones aumentó, especialmente con la rivalidad entre Harry y Viktor Krum.

"Buena prueba," dijo Viktor, con un tono que no escondía su desdén. "No esperaba menos de un Potter."

Harry mantuvo la calma. "Gracias, Viktor. Hice lo que tenía que hacer."

Fleur, por su parte, trató de mediar. "Debemos apoyarnos mutuamente, no pelearnos entre nosotros. El torneo ya es bastante difícil."

Harry, Viktor y Fleur se miraron entre ellos. El aire estaba cargado de la competencia feroz que impregnaba el torneo. Harry sabía que tenía que mantener la calma y no dejar que Viktor lo provocara. La primera prueba había sido agotadora, pero lo que estaba por venir prometía ser aún más desafiante.

Una mañana Viktor Krum, con su porte atlético y su expresión severa, se acercó a Harry, dejando claro que no estaba interesado en ser amigable. "¿Crees que puedes ganar esto, Potter?" preguntó con una sonrisa sardónica.

Harry respiró hondo. "No se trata solo de ganar, Viktor. Se trata de probarse a uno mismo."

Viktor levantó una ceja. "Eso suena como algo que diría alguien que no está acostumbrado a ganar."

Fleur, viendo que la situación podía escalar rápidamente, intervino de nuevo. "Basta, Viktor. Estamos aquí para competir, no para pelear entre nosotros. Hay una línea delgada entre ser competitivo y ser hostil."

A lo que Harry contestó. "Fleur tiene razón. Todos queremos ganar, pero no necesitamos ser enemigos. Podemos competir con honor."

Viktor miró a Harry y luego a Fleur. "Muy bien, Potter. Veremos cuánto honor hay cuando las cosas se pongan difíciles."

Con eso, Viktor se dio la vuelta y se alejó, dejando a Harry y Fleur reflexionando sobre sus palabras. La rivalidad y la tensión eran inevitables en un torneo de esta magnitud, pero Harry sabía que no podía permitirse perder el enfoque.

Harry se levantaba temprano cada mañana para entrenar. La segunda prueba estaba a la vuelta de la esquina, y no podía permitirse el lujo de relajarse. Se encontró con Daphne en la biblioteca, ambos rodeados de libros sobre criaturas mágicas y hechizos avanzados.

"Tenemos que estar preparados para cualquier cosa," dijo Daphne mientras hojeaba un voluminoso tomo sobre hechizos defensivos.

"Lo sé," respondió Harry, frotándose los ojos cansados. "Pero es difícil concentrarse cuando Viktor y los demás están siempre observando, esperando que cometa un error."

Daphne puso una mano en el hombro de Harry. "No te preocupes por ellos. Solo concéntrate en lo que puedes controlar."

Mientras tanto, Fleur y Viktor estaban en los terrenos de Hogwarts, practicando juntos. Habían decidido colaborar en algunos aspectos, compartiendo conocimientos y estrategias.

"Es bueno tener a alguien con quien entrenar," dijo Viktor, lanzando un hechizo de protección que envolvió a Fleur en un escudo brillante.

"Sí," respondió Fleur, sonriendo. "Aunque al final, cada uno debe enfrentarse a sus propios desafíos."

Krum asintió con convicción.

En la noche Harry se encontraba solo en la torre de Ravenclaw una noche, mirando por la ventana. Las estrellas brillaban en el cielo claro, pero su mente estaba llena de dudas.

"¿Estoy realmente preparado para esto?" se preguntó en voz alta.

En ese momento, Michael entró en la sala común y vio a Harry. "Oye, Harry. ¿Todo bien?"

Harry sonrió débilmente. "Sí, solo pensaba en la próxima prueba. A veces, parece que todo esto es demasiado."

Michael se sentó a su lado. "Recuerda que no estás solo. Nos tienes a todos nosotros que somos tus amigos y juntos podemos superar cualquier cosa."

Harry asintió y se volteo de nuevo para contemplar las estrellas en el hermoso cielo nocturno "Tienes razón, todo va a salir bien con su ayuda".