Lord Potter Black

El Verano de Cuarto Año

El verano había llegado, y con él, una carta inesperada para Harry. Una lechuza se posó en el alféizar de su ventana en su oficina en el castillo Potter, extendiendo la pata para que Harry tomara el pergamino.

"¿Otra carta tuya, hijo?" Dijo el retrato de su padre, lanzando una mirada escrutadora a Harry.

Harry ignoró el comentario de su padre y tomó la carta. Al leer el sello de el banco de Gringotts, su curiosidad aumentó. Abrió el pergamino y leyó su contenido:

Estimado Heredero Potter,

Nos complace informarle que, tras alcanzar la edad de 14 años, ha sido emancipado como Lord Potter de acuerdo con los estatutos de la copa del torneo de los tres magos. Se requiere su presencia en Gringotts para discutir asuntos de su herencia y responsabilidades.

Atentamente,
Griphook,
Gerente de Cuentas Potter

Harry leyó la carta dos veces antes de que la realidad comenzara a asentarse. Se le había olvidado por completo que para competir primero se enmancipo, y ahora era un Lord con responsabilidades y derechos. Necesitaba salir de la casa del castillo hacia Gringotts cuanto antes.

Harry rápidamente envió una  carta a Sirius con Dobby, explicándole la situación. Menos de una hora después, Sirius apareció en la chimenea de la sala de estar con una sonrisa de oreja a oreja.

"¡Harry!" exclamó Sirius, abrazándolo con fuerza. "¡Vamos a Gringotts y luego vamos a celebrar tu emancipación como se debe!"

Harry sonrió, sintiendo una oleada de alivio y emoción. "Gracias, Sirius. No sé qué haría sin ti."

"Bueno, ya no tendrás que preocuparte por eso. Eres un adulto libre, ahhh.. y otra cosa normalmente de estos asuntos se encarga el director de Gringotts" dijo Sirius, lanzando una mirada apreciativa a Harry antes de activar la red Flú.

En Gringotts, Harry fue recibido por Ragnok, un goblin de aspecto severo pero justo. Ragnok los condujo a una sala privada donde comenzó a explicar la herencia de Harry.

"Lord Potter," comenzó Ragnok, "sus padres le dejaron una considerable fortuna y varias propiedades. Además, hay responsabilidades como el jefe de la Casa Potter."

Harry asintió, tratando de procesar toda la información. "¿Y qué significa exactamente ser Lord Potter?"

Ragnok sonrió levemente. "Significa que tiene el control total de sus propiedades y finanzas. También puede tomar decisiones en nombre de su familia y tiene un asiento en el Wizengamot, el consejo de gobierno de los magos."

Sirius intervino. "Y, por supuesto, podemos tener una celebración adecuada para marcar este momento. ¿Qué dices, Harry?"

Harry sonrió, sintiendo una mezcla de orgullo y responsabilidad. "Me parece una gran idea, Sirius. Invitemos a todos nuestros amigos y hagamos de esto algo memorable."

De vuelta en el castillo de los Potter, Harry y Sirius comenzaron los preparativos para la celebración. Decidieron invitar a todos sus amigos más cercanos, incluyendo a Cygnus y Thadeus, dos magos con los que Harry había formado muy buenos lazos durante las vacaciones del anterior año.

"Cygnus y Thadeus estarán encantados de venir," dijo Harry mientras escribía las invitaciones. "Han sido muy buenos amigos y me han ayudado mucho."

"Y no olvides invitar a Michael, Terry y el resto de la pandilla de Hogwarts," agregó Sirius con una sonrisa. "Esta será una celebración para recordar."

El día de la celebración, el castillo de los Potter estaba lleno de vida. Los invitados comenzaron a llegar, maravillados por la magnificencia del lugar. Harry estaba nervioso pero emocionado y ansioso por ver a todos sus amigos.

"¡Harry!" exclamó Daphne al llegar, abrazándolo con fuerza. "¡Estoy tan feliz por ti!"

"Gracias, Daph" respondió Harry, sonriendo ampliamente. "Estoy contento de que estés aquí."

Draco llegó poco después, seguido por Cygnus y Thadeus. "Este lugar nunca deja de sorprenderme, amigo" dijo Draco, mirando a su alrededor con asombro. "Definitivamente eres un lord ahora."

Cygnus y Thadeus se acercaron a Harry, estrechándole la mano. "Felicitaciones, Harry," dijo Cygnus. "Es un honor estar aquí."

"Gracias a ambos," dijo Harry sinceramente. "No podría haber pedido mejores amigos."

La cena fue un banquete espectacular, con platos deliciosos y bebidas mágicas. Sirius se levantó para hacer un brindis.

"Quiero agradecer a todos por estar aquí hoy para celebrar a Harry, nuestro nuevo Lord Potter," comenzó Sirius, levantando su copa. "Harry ha demostrado una valentía y una madurez que superan su edad. Estoy increíblemente orgulloso de él y sé que su futuro será brillante."

Todos levantaron sus copas y brindaron por Harry, que sonrió con gratitud.

"Gracias a todos por venir," dijo Harry, levantándose. "Estoy agradecido por su apoyo y amistad. Esto significa mucho para mí."

Después de la cena, los invitados se dispersaron por el castillo, explorando y disfrutando de la velada. Harry, Cygnus, Thadeus y Sirius se reunieron en una de las salas de estar, donde continuaron conversando y fortaleciéndose sus lazos.

"Sabes, Harry," dijo Thadeus, "tener amigos y aliados fuertes es crucial, especialmente ahora que eres un Lord. Siempre estaremos aquí para ti."

"Así es" añadió Cygnus. "Y aunque el camino no siempre será fácil, sabes que puedes contar con nosotros."

Harry sonrió, sintiéndose afortunado de tener amigos tan leales. "Gracias. Su amistad significa mucho para mí."

Más tarde esa noche, Harry y Sirius se sentaron en el balcón del castillo, mirando las estrellas. Sirius puso una mano en el hombro de Harry.

"Sabes, Harry, me recuerda a cuando tu padre y yo éramos jóvenes," dijo Sirius, con una mirada nostálgica. "James estaría tan orgulloso de ti."

"Gracias, Sirius," dijo Harry, emocionado. "Significa mucho para mí escuchar eso."

Sirius sonrió. "Y recuerda, no importa lo que el futuro nos depare, siempre estaremos juntos. Somos una familia."

Harry asintió, sintiendo una profunda conexión con Sirius. "Sí, somos una familia. Y con amigos como Cygnus y Thadeus, sé que podemos enfrentar cualquier cosa."

Con la primera luz del amanecer, Harry se sintió listo para enfrentar su nuevo rol como Lord Potter. Rodeado de amigos leales y con el apoyo de su familia, sabía que podía enfrentar cualquier desafío.

La celebración marcó no solo su emancipación, sino también el inicio de un nuevo capítulo en su vida, lleno de promesas y oportunidades. Con una sonrisa en su rostro, Harry miró hacia el futuro, seguro de que, con la fuerza de su amistad y su nuevo título, estaba listo para cualquier cosa que el destino le deparara.