Decir que no disfruté de la fiesta que Jungwon organizó sería mentir descaradamente.
No de la manera en la que eres un chico irresponsable y te bebes hasta el agua de los floreros y terminas tan ebrio que no eres capaz de recordar siquiera tu nombre como la mayoría de mis compañeros de universidad lo hicieron. No. En su lugar me dediqué a disfrutar la fiesta sentada en el patio trasero acurrucada junto a Sunghoon, charlando de trivialidades y disfrutando de su compañía.
Y para ser sincera, me gustó así.
— ¿Te gustaría ir mañana a dar un paseo por ahí? —cuestiona el chico entrelazando nuestras manos de manera cariñosa.
—Espera un segundo... ¿Park Sunghoon, el capitán del equipo de fútbol americano de la RUEW, está invitándome a pasear con él? —bromeo y él deja escapar una pequeña risita.
—En realidad estoy pidiéndole una cita, bella señorita—comenta y siento mi corazón dar tumbos de lo que creo que es felicidad dentro de mi pecho.
—¿De verdad? —pregunto bobamente y él ríe divertido.
—Claro que sí. —murmura acariciando el dorso de mi mano. —¿Entonces, Yang Yebin? ¿Quieres tener una cita conmigo?
—Creo que debo estar en mi día de suerte—bromeo. Su enveintitresjo se frunce de inmediato y se ríe provocando que mi corazón se acelere.
Lo observo fijamente y de repente siento el impulso de besarlo. Otra sonrisa aparece en sus labios –una de esas que harían que la mismísima Antártida se derritiera en cuestión de un segundo- y sin apartar su mirada de la mía libera mi mano y acaricia mi mejilla de manera tan delicada que siento como mi cuerpo se eleva un poco, como si mi alma abandonara la solides que posee. Se acerca peligrosamente a mí hasta que su aliento choca contra mis mejillas. Automáticamente cierro mis ojos y le ofrezco una pequeña sonrisa que muere en sus labios cuando cubre los míos en un pequeño y cálido beso.
—¿Vas a convencerme de tener una cita contigo a base de besos? —cuestiono en voz baja.
Sunghoon ríe y vuelve a besarme. —No. Pero, para ser sincero, no me importaría hacerlo...podría besarte toda la noche hasta que te rindas y me digas que quieres tener una cita conmigo.
—Eso no hace falta...—respondo con voz cantarina—porque acepto tener una cita contigo, Sunghoon...—susurro depositando un beso sobre sus labios.
—Te prometo que te va a encantar—anuncia él envolviéndome en un pequeño abrazo.
—¿Sabes qué es lo que no me va a encantar, Sunghoon? —sus ojos color marrón se instalan en los míos y parpadea una par de veces como si estuviese despertando de un largo sueño.
—¿Qué cosa?
—El súper cero que nos va a poner la señora Min si no nos aplicamos con el proyecto final—digo y una enorme risa brota de sus labios.
—¿Te digo algo? —me dice apartándose un poco de mí, lo suficiente para que lo pueda mirar a los ojos, pero no tanto como para experimentar la sensación de pérdida. —Acabas de arruinar un gran momento romántico—me rio.
—Lo lamento, creo que buscaré en YouTube algún curso de cómo ser romántica y esas cosas...no soy buena en esto—me quejo.
—Me gustas así—dice en voz baja—¿Sabes que es lo que más me gusta de todo esto?—pregunta volviendo a acariciar mi mejilla detenidamente y yo niego inmediatamente. Lo observo fijamente y me vuelve a sonreír provocando un estremecimiento total en mi piel—Que nosotros, tú y yo, vamos a pasar mucho tiempo juntos, mucho...
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TEN REASONS FOR NOT LOVING YOU || PARK SUNGHOON
FanfictionNo choco en las esquinas de los pasillos con chicos guapos con el físico de Christian Yu y con el rostro de Lee Jong Suk. No. Mi enemiga número uno no suele ser la animadora de sonrisa diabólica que se cree la Barbie del colegio con un sequito de...