extra (multiverso del CAP 10)

816 103 15
                                    

Después de aquel mágico beso y el desayuno compartido, Gema y Vladimir comenzaron a construir una relación sólida y llena de complicidad. Con el tiempo, sus sentimientos se profundizaron y Vladimir, con su corazón lleno de amor, decidió dar el siguiente paso

En una noche especial bajo las estrellas, Vladimir tomó las manos de Gema y le confesó sus sentimientos más profundos. "Gema, desde que te conocí, mi vida ha cambiado para siempre. No puedo imaginar un futuro sin ti a mi lado. ¿Te gustaría ser mi esposa?"

Gema, con lágrimas de felicidad en los ojos, asintió sin decir una palabra. Esa noche celebraron su amor con promesas de un futuro juntos.

Más adelante, Vladimir decidió compartir un secreto que había guardado por mucho tiempo. "Gema, soy hijo del jefe de la mafia rusa. Pero por ti, estoy dispuesto a dejar ese mundo atrás. Quiero construir una vida honesta y feliz junto a ti."

Gema, sorprendida pero comprensiva, lo abrazó con fuerza. "Vladimir, lo único que importa es que estemos juntos. Te perdono por no contármelo antes. Juntos enfrentaremos cualquier desafío que se nos presente."

Sentados en su acogedor apartamento, Gema y Vladimir discutieron los detalles de su boda. "Imagino una ceremonia íntima y elegante", sugirió Gema. "Con flores blancas y velas por todas partes", agregó Vladimir con una sonrisa. Juntos, planearon cada detalle con ilusión y amor.

El día de su boda llegó, y Gema caminó hacia el altar radiante de felicidad. Vladimir la esperaba con ojos llenos de amor y promesas para toda la vida. Después de la ceremonia, partieron hacia una romántica luna de miel en un destino paradisíaco, donde se dedicaron a explorar el mundo juntos.

Durante su luna de miel, Gema descubrió que estaba embarazada. Quiso hacer de este momento algo especial para Vladimir, así que organizó una cena romántica a la luz de las velas. Con una sonrisa nerviosa pero emocionada, le entregó un pequeño par de zapatos de bebé.

Vladimir tardó unos segundos en comprender, pero cuando lo hizo, sus ojos se llenaron de lágrimas de alegría y emoción. Abrazó a Gema con ternura, sintiéndose el hombre más afortunado del mundo.

Durante el embarazo de Gema, experimentaron juntos las alegrías y las dificultades típicas. Vladimir se dedicó a mimarla y cuidarla en cada etapa, desde los antojos nocturnos hasta los cambios de humor repentinos, siempre con una sonrisa amorosa en el rostro.

Finalmente, llegó el momento más esperado. Gema dio a luz a su hijo, Elian Romanov Lancaster. Vladimir estaba a su lado, sosteniendo su mano y lleno de orgullo y amor por su familia.

Con Elian en sus brazos, Gema y Vladimir miraron hacia el futuro con esperanza y determinación. Superaron desafíos juntos, construyeron una familia basada en el amor y la comprensión mutua, y vivieron felices para siempre en su hogar lleno de risas, amor y paz.

||RAME|| Gema Lancaster Donde viven las historias. Descúbrelo ahora