¿Verdad o Reto? (Continuación)

Capitulo 19.

El sol resplandecía en lo alto del cielo iluminando el basto mar de nubes del cielo, donde una nave mejorada viajaba por los aires surcando las nubes por la pilotó que estaba conduciendo y esa era nada más ni nada menos que Hatsume Mei, que no pudo con la tentación y hizo que el avión de una vuelta completa, algo que le divertía a ella, pero no a los que no llevaban un cinturón puesto. En la cabina de la conducta, se podía ver cómo Saiko y Mei discutían sobre cosas incoherentes para los demás, pero estaban discutiendo el costo de los materiales de futuros proyectos. En la zona de los pasajeros, se podía ver cómo Toru hablaba de cosas de emparejamientos con Pony, mientras tanto Sero hablaba con Mineta sobre su forma pervertida de ser y como eso no le daría una chica, aparte de envidiar la suerte del brócoli del protagonista, Tsuburaba miraba con una sonrisa nerviosa a un Kuroiro volando de celos mirando a un pecoso, que estaba sudando de nervios y con una gran fuerza de voluntad, debido a que tenía a Kinoko sentada entre sus piernas y ¿Dónde estaba Yui? Estaba en el baño, que para su desgracia estaba haciendo sus necesidades cuando Mei dio la vuelta.

– No te levantes, no te levantes, que no te levantes. – Pensaba el pecoso, sintiendo como el trasero de Kinoko colisionaba contra su gran titán dormido.

– Izuku-San, ¿Podrías abrazarme para poder dormir? – Kinoko pregunto en un tono dulce y tierno, haciendo la técnica que vio qué Eri usaba. La técnica de los ojos de cachorro.

– E-esta bien, Komori. – Izuku intento oponerse, pero lamentablemente su fuerza de voluntad no era la suficiente. Así Kinoko se puso unas antifaz para dormir acurrucada sobre el pecoso. – Oh, Kodai. – Izuku miro nervioso a la peli azabache, qué después de una larga limpieza ya estaba limpia.

– Pervertido, yo también quiero. – Dijo Yui mirando al pecoso con la mirada ensombrecida.

Era sorprendente que Yui pudiera caminar después de lo de anoche, aunque Yui no lo diga, simplemente caminar era todo un reto imposible al no sentir del abdomen hacía abajo. Mientras tanto, en la cabina del conductor, vemos a Mei mirando la desordenada cabina de control notando que una luz roja se prendía y se apagaba, no recordando que significaba, porque básicamente el panel de control era un desastres de luces y palancas.

– Directora Intelli, mira. – Mei le hablo a Saiko que la miro.

– Análisis.

– Parece, uno de los focos encandecentes diseñados para indicar algo fuera de lo ordinario, como una avería. – Comento Mei.

– A mí me parece bonita y un tanto hipnótica. – Saiko comento haciendo que Mei le diera la razón, así que la peli lavanda tomo el manual grueso del avión con las instrucciones y vio las instrucciones, al estar básicamente ilegible las palabras del Manual, lo uso para romper el foco de luz. – Problemou resuelto.

– Señora, creo que el combustible se acabó. – Comento Mei.

– Y ¿Qué te hace creer eso?

– Hemos perdido la turbina uno. – Mei miro a la turbina mejorada del lado derecho. – Y la turbina dos, ya no se está incendiando. – Miro la turbina que anteriormente estaba en llamas, antes de mirar a Saiko.

– Ponte el cinturón de seguridad. No mires pequeño, esto se pondrá feo. – Le tapo los ojos a un muñeco de Izuku, que había comprado de la nueva fábrica que tenía Momo, hecha para crear mercancía de Izuku. Entonces tomo el comunicador del avión. – ¡Atención! Les habla su Capitana. Tenemos una buena y una mala noticia, la buena es que aterrizaremos de inmediato, la mala es que caeremos en picada. – Apenas terminó el aviso, el avión se paro antes de empezar a caer en picada. – Cuando se trata de volar, sabemos que no tienen otra opción, gracias por volar con areo Mei.