Habian pasado varios dias desde que Bell comenzó su nuevo viaje por todo el 'Este' del mundo.
Paso de pueblo en pueblo y algunas ciudades pequeñas donde pudo descansar y conseguir recursos necesarios.
Tenía que admitirlo, el mundo era gigantesco y muy bello pero nunca lo pudo ver, el estar siempre en Orario peleando contra monstruos en el dungeon o con alguna familia rara, entrenar con 'ella', ayudar en lo que podia a los civiles y siempre mantener una actitud positiva le prohibió explorar y vivir todo a su alrededor.
Eso nunca volverá a pasar ya que ahora decide su propio camino.
Aunque también sabia que debia seguir entrenando, tenia magia de fuego pero estaba muy limitada y si bien su maestro lo ayudo mucho, se baso principalmente en su cuerpo y todos sus componentes pero no le pudo enseñar nada de magia.
¿A donde ir?
Fue su pregunta mientras descansaba en la posada de un pequeño pueblo.
B9: Teníamos planeado ir hacia Plex.
Esas palabras llegaron a su mente, no tenia casi ningún conocimiento de ese lugar, le pregunto a su maestro pero el solo dijo.
Yamamoto: Solo ve si es estrictamente necesario o si no sabes como continuar con tu "vida"
Solo ir si es necesario o debo continuar mi vida. Ahora mismo no tenia un plan fijo.
Su anterior aldea estaba a varios dias de distancia y lo peor es que estaba cercas de Orario, nada le aseguraba que no lo encontraran y no queria poner en peligro a los habitantes.
Plex. Se volvió a repetir.
???: Ve a Plex, encontraras a alguien que te ayude con tu magia o talvez podrias conseguir un arma.
Supongo que no estaria mal ir ahora, tal vez encuentre a alguien que me ayude con la magia o poder conseguir un arma, si su maestro fue tan amable de no darle un arma para que no cargara mas peso.
Con su nuevo objetivo se puso en marcha, le pregunto a las personas que vivian en la misma posada sobre Plex y para su surte le dijieron donde estaba y muy amablemente le dieron un mapa para no perderse.
Aunque sus sonrisas de burla no le daban buena espina el estaría preparado para cualquier cosa.
Espero a la mañan siguiente, tomo sus cosas y se embarco en su nuevo viaje.
A las pocas horas que Bell se fue del pueblo un dios ya conocido llego preguntando por el.
Lastimosamente le dijieron que ya se habia ido hace mucho y el dios solo pudo llorar un rato y luego siguió con su busqueda.
2 dias después.
Finalmente llegue. Diria un muy maltratado Bell.
Para su sorpresa el camino fue un infierno, rateros, pandillas, animales salvajes, caminos donde no podia pasar, etc.
Fue toda una travesía pero llego y eso era lo importante.
Podia ver en frente unas gigantescas murallas muy parecidas a Orario, pero estas tenian un toque sombrio.
El lugar era bastante oscuro y deprimente, los cielos antes azules ahora parecian verdosos y hasta donde podia ver habia muchos edificios raraos que aventaban mucho humo verde.
Este lugar era muy único.
Pero no iba a juzgar tan rápido por lo que dando su mejor sonrisa camino hacia la entrada.
Guardía: Alto, identifíquese.
Sin poner resistencia dejo que lo inspeccionaran, aunque algo que noto fue como los ojos del guardia cambiaban poco a poco.
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EL TORNEO DE DIOS
ActionUn mundo donde la intervención de un dios que buscaba diversión destruiría la esperanza de los mortales provocando el desequilibrio del mundo trayendo a muchos seres con poderes inimaginables y ocasionando el caos en los cielos donde su única salvac...