Enemys to Lovers // Saga Enemies (1er Libro) (Completo ✅)

EXTRA 10 // ESPECIAL 10K!!!!!! (pt2)

***Bueno, chiquis, aquí está la segunda parte de este maravilloso especial que llevo escribiendo como dos semanitas, espero que os guste mucho y, como siempre, comentad y votad, que me ayuda mucho.

Gracias por todo una vez más. 💕***

CONTINUACIÓN DE AMY

Cruzo una mirada breve con él, que me lo tiende en su habitual silencio.

Murmuro un gracias y lo agarro con un suspiro.

Se me había olvidado, otro integrante del grupo. No es que me caiga mal, pero solemos discutir bastante. No por nada en general, simplemente... Creo que me da rabia que sea capaz de no importarle nada. A veces desearía que las cosas me importaran tan poco como a él.

Le observo desplazarse a la bodega. Sin preguntar. A su puta bola, como siempre. Quizás de estar en otro modo le habría cuestionado su educación y su descaro, pero ahora mismo no tengo la energía necesaria.

Os diría qué le pasa a él. Porque, como a todos, a él también le están afectando las cosas y el ambiente en general. Pero sinceramente no lo sé. Nadie sabe qué pasa por su cabeza. Solo sabemos que él sabe sobre Luca y Liam. Pero su silencio es imperturbable. Cuando se pone cabezón no hay quien le mueva.

- ¿No tenéis vodka? -pregunta saliendo de la bodega. Niego con la cabeza.

- No está ahí. -explico. Me bajo del taburete de un salto, decisión que no es demasiado inteligente, dado que ya no tengo toda la coordinación que necesitaría para aterrizar correctamente, lo que causa que trastabille y tenga que ser el propio Blake el que me ayude a estabilizarme. -Estoy bien. -digo antes de que abra la boca, tratando de recomponerme. -El vodka era el favorito de mi padre. Está en la bodega de su habitación.

- Ah, pues, no... -comienza él.

- Ven, anda. -le digo, cogiéndolo del brazo, e indicándole que me siga, después de coger mi propia botella y darle otro sorbo.

Le guío a la habitación de mis padres. Si mi casa fuera un hotel, sería la suite, con saloncito, baño con jacuzzi, vestidor... Recuerdo que cuando era pequeña adoraba estar ahí. Sobretodo porque mi habitación era una habitación normal y corriente. Con los lujos de una niña rica, claro, pero son tanta sala. Para mí entrar en la habitación de mis padres era como entrar en una casa dentro de la casa.

No ponía un pie dentro desde que los encarcelaron.

En realidad, esa escena aún se repite en mi cabeza durante la noche de vez en cuando.

El estruendo del FBI tirando la puerta principal abajo. La velocidad con la que seguí el ruido hasta la suite. Cómo me impidieron acercarme. La forma en que se llevaban a mis padres con las esposas en la espalda. Mi padre revolviéndose. Mi madre humillada.

No había querido volver a poner un pie ahí. Hasta hoy.

Habría dicho que había sido el momento más traumático de mi vida si no fuera porque viví un tiroteo en mitad de la calle y en el cual yo era el objetivo.

En cualquier caso, guío a Blake hasta la cava y le entrego una botella de vodka junto a uno de esos vasos bajitos que a mí padre tanto le gustan.

Él se sirve y se deja caer en uno de los grandes sillones que decoran la habitación.

No sabría decir por qué, pero se ve más deprimido de lo normal.

Le dedico una mirada algo confundida y me siento en el otro sillón, dando un trago a mi botella de Ron.