Mirame a mí, solo a mí (PAUSADA)

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Creo que he reaccionado un poco…tarde. Los besos de Taehyung están bajando por mi mandíbula y temo a que lleguen a mi cuello porque es una zona sensible en mi. Sus manos se cuelan por mi playera, haciéndome erizar y estoy reteniendo los jadeos apretando mis labios.

La lucha constante entre detenerlo o seguir sigue en mí, es tan difícil, pero…¡Jimin! Joder, Jimin es el novio de Taehyung y mi amigo. ¿Qué mierda?

—Pa-para —logro decir. Nuestros rostros vuelven a estar cerca y nuestros labios nuevamente rozándose.

Aunque esto sea algo que añoré por mucho, no se siente para nada bien en estos momentos. No cuando Jimin está en medio de esto. Ese pequeño chico también es mi amigo y si Taehyung no lo tuvo en cuenta para cuando se dejó llevar por sus “impulsos” y probablemente celos, yo si lo hice. Tarde, pero lo hice.

—Jungko-

—Tae esto…no está bien. Para nada bien —mi voz sale en un susurro, no es necesario decirlo más alto, pues por la cercanía que mantenemos es suficiente para que lo escuche perfectamente.

—Con “esto” te refieres a que te bese y esté encima de ti, ¿No? —su voz sale ronca y me hace sentir una descarga que va a dar justo donde menos quiero. Sonríe y se relame los labios con la punta de su lengua. —¿Está mal?

—Por supuesto, Taehyung. Tienes novio y si no lo recuerdas es también mi amigo.

Nuestros labios se tocan, quizá por la brusquedad con la que hablo, quizá por mucha cercanía o quizá también, por ambas.

Estoy por caer de nuevo en eso que llevábamos haciendo, mierda. ¿Por qué mi cuerpo reacciona tan rápido a la cercanía de Taehyung?

Tae suelta un suspiro y se reincorpora. Pasa cada una de sus piernas por un lado de mi cintura y sus manos las apoya en mi pecho. ¿Lo está haciendo con intención? Por supuesto que lo hace con una maldita intención y quiero creer que puedo distraerme con cualquier otra cosa, quizá con la molestia de que he traicionado a Jimin. Pero no funciona. Mi cuerpo reacciona de otra manera.

—Kookie… —muerde su labio inferior, sin dejar de mirarme. —Me tienes confundido, ya no se a quien quiero y a quien deseo, Jungkook. —abro la boca para decir algo, pero es más rápido y coloca un dedo sobre mis labios. —No sé que me pasa. Cuando te veo con NamJoon o lo mencionas mi humor cambia, los celos me consumen.

—Esa no es excusa para hacer esto, Tae. —Aun con su dedo encima de mis labios hablo, sintiendo como acaricia con la llena de este mi labio inferior. —Jimin es tu novio, no es jus-

—¿Importa ahora lo que es o no justo? —deja una caricias con sus dedos en mi mejilla y recorre con su manos mi pecho y estómago. —Sé que no es correcto, tampoco es justo, pero es un deseo que ambos tenemos —me quedo en silencio repasando sus palabras.

La pequeña plática que tuve con mi madre viene a mi cabeza, pegándome fuerte como si fueran un martillo. Entonces si tiene una atracción por mi…

Dejo escapar un jadeo cuando siento que mueve su cadera atrás hacia delante y luego se vuelve un movimiento repetitivo.

—Tae, no…

—Dejate hacer, Kookie —detiene sus movimientos y se acerca a besar mis labios.

¿Dejarme hacer? Mierda, me voy a arrepentir de todo esto después. De eso puedo estar seguro. Pero los besos y toqueteos que mantiene Taehyung sobre mi me hace enloquecer.

Todo esto sobrepasa mi imaginación. Mi entrepierna y la de Taehyung rozan, haciendo a ambos soltar un gemido.

—¿Quieres ser primero el de arriba o el de abajo? —¿Desde cuándo la voz de Taehyung es tan malditamente ronca y áspera?