2

67 9 0
                                    

Ruedo los ojos al ver que ninguno de los dos parece querer acabar con la pequeña discusión que han mantenido más de la mitad del camino.

—No tienes porqué enojarte por algo tan estúpido como eso, Kim —dice jimin con evidente molestia y exasperación.

Agradezco que solo hace falta una cuadra para llegar a la escuela porque siento que mis oídos ya no pueden soportar por más tiempo la voz chillona de ambos. ¡Se están comportando como unos niños o peor!

Desde que Jimin se unió a nosotros para ir a la escuela, insistió para que Taehyung le dijera por qué estaba enojado con él. Cuando Tae le explicó el por qué diciendo “Eres un falton”, Jimin se enojó y le exigió que se disculpara y todo ese rollo. Por eso comenzaron a discutir.

Ni siquiera la música alta me hace dejar de escuchar sus chillonas voces.

—Nunca he sido un mal amigo. No los he dejado solos nunca, Tae. Nunca. Esta vez es porque Harú necesita de mi ayuda y me pidió que no le contara a nadie, a absolutamente nadie. Es un tema muy personal. —Jimin estaba con su rostro rojo y expresión sería.

—Nos has dejado en el receso, cuando forman grupos también, en la salida y en clases de deporte. ¿Y dices que no nos has dejado solos?

Ruedo de nueva cuenta los ojos. Me irrita esta situación.

Si Taehyung supiera del enamoramiento que tiene Jimin hacia ese chico que es líder del equipo de básquet…

Jimin bufó harto de la situación. Se nota lo irritado que está por el berrinche que le está haciendo Tae.

—lo he hecho porque en el receso, tú estás en la biblioteca —lo señala. —Y kookie está en el salón de la señorita Jeong. —asiento dándole la razón.

«Echando más leña al fuego»

—antes no te importaba pasar tiempo en la biblioteca conmigo —se cruza de brazos y mira a Jimin.

Fingir demencia por la escena y cada puta palabra que sale de la boca de Taehyung hacia Jimin, es mi especialidad.

—si, lo hacía porque la sala de baile no está habilitada este año y no conocía con quién más hablar en mi receso. Hasta que empecé a hablar con Harú. No le veo nada de malo  —dijo Jimin. —por favor, Tae. No me hagas decirte más razones que no existen. Sé que no he estado con ustedes como antes solía hacerlo, pero eso no quiere decir que los dejaré de lado. Son mis amigos y voy a estar para ustedes siempre, pero Harú me necesita en estos momentos.

¿Qué mierda hago aquí? Estoy jugando un papel de tercio increíble o así es como me siento.

—Ya, ya. Entendí todo, Jimin —Dice soltando un suspiro.

Jimin sonríe y toma del brazo a Taehyung y mi, deteniendo nuestro paso.

Jimin es como un imán que nos une, pero a la vez siento que es esa parte negativa que nos separaba a Tae y a mí.

—yo los quiero un montón, chicos. A los dos, los quiero mucho. —se acercó a ambos y nos abraza al mismo tiempo. Sonrio un poco, mirando como Tae formaba un puchero con sus labios. —les prometo que estaré con ustedes como antes, cuando toda la situación con Harú mejore, ¿Si? —asiento  al igual que Taehyung, que parece relajarse totalmente con las palabras de Jimin.

Quien reclamó el “distanciamiento” de Jimin del grupo fue Tae, pero sé que Jimin piensa que yo, al igual que ese castañito tonto y lindo, estaba enojado con él.

Al fin veo frente a mi el gran portón de la escuela, hago una mueca al entrar y oír voces por doquier. Mis oidos están sufriendo con tanto bullicio desde que mis dos queridos amigos comenzaron esa tonta discusión.

Mirame a mí, solo a mí (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora