𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐜𝐮𝐚𝐭𝐫𝐨

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∙:♛:∙ᴀᴄᴛᴜᴀʟɪᴢᴀᴄɪᴏɴ ɪ/ɪ∙:♛:∙

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EN ESCENA
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(𝙾𝙼𝙽𝙸𝚂𝙲𝙸𝙴𝙽𝚃𝙴)

El poder, en su forma más pura, no se trata de quién tiene el control directo, sino de quién puede influir en las decisiones de aquellos que creen tener el control. En el mundo de la mafia, el verdadero poder reside en la capacidad de manipular las percepciones, de tejer una red de influencias invisibles y de mantener el equilibrio entre el respeto y el temor. Es un juego de apariencias donde la fuerza bruta es solo una herramienta más, y la verdadera maestría se encuentra en el arte de la persuasión y la estrategia silenciosa. Porque, al final, el poder que se exhibe abiertamente es efímero, pero el poder que se ejerce desde las sombras es eterno.

El poder bruto puede abrir puertas, pero es la sutileza y la astucia las que mantienen abiertas esas puertas a largo plazo. La verdadera maestría en el manejo del poder reside en la capacidad de anticipar movimientos, de manipular percepciones y de convertir a los enemigos en aliados, todo sin perder el control de la propia humanidad.

El poder efectivo no es aquel que se ostenta abiertamente, sino el que se ejerce de manera casi imperceptible, dejando una marca indeleble en las decisiones de aquellos que creen ser independientes. Así, un líder no es simplemente un dictador, sino un estratega, un maestro del engaño y la diplomacia. Entiende que cada acción, cada palabra, tiene un peso y una consecuencia que puede reverberar a lo largo de su imperio.

En este mundo, la compasión no es una debilidad, sino una herramienta afilada, utilizada con precisión para consolidar lealtades y evitar rebeliones. Saber cuándo mostrar misericordia y cuándo ser implacable es lo que distingue a un verdadero líder de un mero tirano. Porque al final, el poder absoluto puede corromper, pero también puede construir legados que perduran más allá de la vida de quien lo ejerce.

Aquella era la principal razón por la cual Drystan Wyltz ya no trataría de lidiar con Kssian Iakobo, sabía que volver a intentar razonar con su persona no terminaría de manera agradable, entonces, se aseguraría de debilitarlo. Tenía cosas mucho más importantes de las cuales ocuparse y, todo ese asunto se estaba volviendo un estorbo.

Demyan Mikahilov, su padre adoptivo y líder de una organización muy poderosa le había enseñado cosas muy valiosas que hoy le serian de utilidad. La habilidad de negociar con razonamiento: Dar para recibir.

Había una razón por la cual Dieter Von Nacht, e incluso el mismo Mikhailov no deseaban que Astreyd se enfrentara a Iakobo, sería un enfrentamiento sangriento en el cual muy probablemente este sea quien termine afectado mortalmente, y esto no le convenia a nadie, pues Kssian Iakobo estaba ligado a un clan mucho más poderosos que el suyo, de hecho, si se consideraba el Clan de Lobos uno de los más temido de Russia es por su alianza con el Clan Hijet (Clan de las sombras), el más imponente de toda Albania. Se trataba de personas realmente sangrientas con las cuales era mejor no involucrarse ni en el pensamiento.

La promesa de Mr. Wyltz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora