XXVII.

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- Sus, ¿todo bien? -preguntó un tipo detrás de ella- ¿Eres Alan Mozo? -preguntó sorprendido- ¿Cómo se conocen? -se dirigió hacia Sus.

- Alex, no es momento -intervino una mujer- me tengo que llevar a Sus -dijo tomandola del brazo.

- Solo dame un minuto con ella, por favor -pedí.

- Ella tiene que decidir, no yo -comentó.

- Por favor -pedí dirigiendome a Sus, ella observó a los dos norteños que tenia a su lado y asintió.

- ¿Vamos a fuera? -pregunté, aunque aquello fue más una petición.

- Solo si ellos me acompañan -pidió y sus acompañantes nos siguieron.

- Bien -suspiró.

- Soy un idiota -comenté- perdí lo más importante que tengo en este momento en mi vida que eres tú -confesé- mis días y noches no han sido lo mismo desde que no estás conmigo, sé perfectamente que lo que hice no tiene nombre ni explicación. Pero por Dios que te amo como no tienes idea, sé que no te merezco -hice una pausa para ver si ella quería intervenir, pero sus ojos solamente se venían acuosos- solo quiero que sepas que lo que pasó, lo que hice fue parte de una peda y claro que eso no es justificación. Regresa conmigo por favor -pedí y ella negó.

- No puedo -dijo.

- Te juro que no pasó nada más allá de un beso -traté de explicar- amor, por favor -pedí y ella volvió a negar- haré lo que tú me digas, pero regresa conmigo -comencé a desesperarme y la tomé por sus brazos.

- Alan -intervino Fer- deja que ella procese todo -pidió.

- ¡Cásate conmigo! -pedí e intente hincarme.

- Alan -volvió a hablar Fer.

- Fer, tú sabes lo que siento por ella -dije en un punto de mayor desesperación.

- Si, pero no es el lugar, hay demasiadas personas -comentó- Sus, ¿podemos ir a algún lugar privado para que hablen? -preguntó.

- No tengo departamento aquí -dijo- estoy en un hotel -explicó.

- ¿Podemos ir? -pidió Fer- me quedaré ahí para cuidarte, igual puede ir alguno de tus amigos -ella asintió.

El traslado a su hotel lo hicimos por separado, íbamos siguiendo a Sus y los nervios se hacían cada vez más grandes.

- ¿Te puedo pedir un favor? -habló Fer rompiendo el silencio que teníamos, a lo cual asentí- no presiones a Sus, yo sé que quieres arreglar las cosas, pero no de una manera insistente que la haga incomodar. Alan lo que pasó claramente le han generado muchas ideas, y no estoy de parte de ninguno, simplemente quiero lo mejor para ambos, y si eso significa que ustedes no vuelvan tendrás que asumir las consecuencias de tus actos -habló, jamás lo había escuchado decir algo tan en serio en su vida como hoy.

Sus Jarero

Sentía que en cualquier momento iba a vomitar de los nervios que sentía, no me esperaba ver a Alan aquí, y menos que me hablara. ¿Por qué el universo nos había juntado otra vez?

- Me estoy arrepintiendo de hablar con él -le dije a Haris.

- Sino quieres ahorita le decimos que se regrese -habló.

- Yo creo que sí -aquello había sido más una súplica.

- ¿Segura? Porque estamos a una cuadra de llegar, y no te dejaré bajar -sentenció.

- Yo digo que hables con él -intervino Alejandro ganándose una mala mirada por parte de Haris- así resuelves todo de una vez, si quieres intentarlo otra vez o simplemente dejarlo.

- Por primera vez le doy la razones a Alejandro -comentó Haris.

- Pero solo no me dejen sola -pedí y ellos asintieron.

Llegamos al hotel, esperamos a que Alan y Fer llegaran, una vez que estuvimos todos pedí que fuéramos a la terraza, no quería que estuviera en mi habitación. Haris, Alex y Fer se quedaron a unos pasos "contemplando" la madrugada.

- ¿Qué querías hablar? -pregunté al ver que Alan no decía nada.

- Te amo -dijo y guardo silencio.

- No lo creo -comenté.

- Es verdad, también es verdad todo lo que te dije hace rato -suspiro- no sé que más hacer, te juro que jamás me ha importado tener a alguien en mi vida como a ti.

- Alan, yo, me cuenta creer todo. En verdad todo, ¿Por qué lo hiciste? -pregunté.

- No tengo justificación, si pudiera cambiarlo creeme que lo haría -comentó agachando su cabeza- ¿Qué quieres que haga? Necesito que vuelvas a creer en mi, que vuelvas a mi vida.

- Ya no sé si te sigo queriendo -comente, pero fue más para convencerme a mi que a él.

- No te preocupes mi amor, que yo tengo amor suficiente para los dos -tomó mis manos y las beso.

- No sería justo -suspire y solté mis manos de su agarre.

- Vuelve conmigo, el lunes vayamos a Guadalajara otra vez. Haremos las cosas como tu quieras -explicó.

- No me puedo ir -informé y a él se le cristalizaron los ojos- tengo trabajo aquí.

- ¿Para siempre? -preguntó- puedo ver la manera de que me compren -dijo acelerandose.

- No, no hagas eso -pedí asustada de que cambiara todo- solo es una temporada.

- ¿Entonces? -pregunto aun con esperanza.

- No es fácil para mi, ¿sabes? -comenté.

- Lo sé -susurro- lo que te dije hace rato sigue en pie.

- ¿Qué parte? -cuestione, no sabia que parte de todo lo que me dijo.

- Cásate conmigo -pidió.











¡Hola! ¡Hola! Espero que se encuentre super, les dejo un capítulo más 🥰
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Conspira Universo, Alan Mozo /TERMINADA/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora