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"Besos de dolor"
Una semana después...
Mi respiración se agitó cuando la vi, una sonrisa de emoción se dibujó en mis labios y corrí a abrazarla...
— Vic... — Susurré recargando mi cabeza en su hombro, ella escondió su rostro en mi cuello. — No sabes cuánto te extrañé...
— Esperaba el momento para abrazarte... — Al separarme la miré con detenimiento.
— Tu cabello... — Dije mirando su ahora cabello rojizo vino, dejando atrás el rubio grisáceo.
— Oh, sí, ¿te gusta? — Preguntó con una risita nerviosa.
— Me fascina, te miras muy hermosa.
[...]
— ¿Que no estaba contigo Samantha? — Preguntó mientras guardaba algunas en un cajón.
— Pues... Me dijo que saldría, la verdad no sé dónde está... — Comenté mientras colgaba algunas de sus hoddies. Noté el leve mohín que se formaba en sus labios. — ¿Cómo están tus papás?, ¿se recuperó tu mamá? — Pregunté cambiando de tema drásticamente.
— Están bien, quieren que vayas a visitarlos. — Reí suavemente. — Mamá afortunadamente se recuperó y su enfermedad no pasó a mayores. — Se acercó a mí y se puso frente a mí. — ¿Tú cómo estás?
— Estoy bien, ¿por qué lo preguntas, Vic? — Dije mirándola a los ojos.
— Bueno, tus ojos me dicen que algo te pasa.
— Nada, Vic, estoy bien... — Le sonreí levemente y dejé la última hoddie.
— No mientas, princess. — Apreté mis labios y suspiré.
— Sólo estuve mal un día, ya sabes, recordando a mis padres y a mi familia, sólo eso... — Mentí. Claramente que mentía. Pero si le decía que era porque ella me había estado evitando e ignorado Victoria iba a explotar contra ella, y era lo que menos quería en este momento...
— ¿Estás segura de eso...? — Sentí como acarició mi cabello. Asentí levemente y ella me abrazó con rapidez. — Necesitaba mucho estar contigo. Me hiciste mucha falta...
Me aferré a ella y suspiré. — También me hacías falta... — La necesitaba tanto...
[...]
Las horas pasaban, Samantha no llegaba, comenzaba a preocuparme y no quería armar un escándalo... Victoria me veía con preocupación y extrañez en su rostro.