LIBRO DE LETRAS (RECOPILACION DE OS)

Mundos diferentes (Dabideku)

𝑻𝒊́𝒕𝒖𝒍𝒐: 𝑴𝒖𝒏𝒅𝒐𝒔 𝒅𝒊𝒇𝒆𝒓𝒆𝒏𝒕𝒆𝒔

Ship: Dabideku
Dia 2: Estigmatofilia
AU: Universitarios

Notita: este forma parte de una serie de OS de los temas seleccionados para la oddweek
#kumareto
#isnotafilia

Era parte del grupo de nerds de la facultad de gestión empresarial, un chico que no solía vestir a la moda, tenía miedo de mostrar su cuerpo, pues siempre era juzgado diciéndole que sus facciones son demasiados femeninas para ser un chico, por lo que prefiere esconderse bajo ropa que le queda grande, cuando estaba con sus amigos siempre mostraba una hermosa sonrisa y se divertía con ellos, pero no todo es color de rosa.

Izuku Midoriya tenía a dos bullies que lo atormentaban cada vez que lo veían solo, principalmente por su forma de vestir, eso no ayudaba a sus inseguridades, y su miedo a no demostrar su encanto ante los demás.

Ese día estaba leyendo un libro debajo de la sombra de un árbol, estaba esperando a su novio, pero casi nadie pasa por esa zona, siempre esperaba ahí al chico que tenía su corazón, cuando escucho pasos

-Vaya, vaya – se escuchó la voz de Monoma – parece que hoy tenemos suerte, ¿no crees Toga?

Izuku levantó la vista, sintió como su corazón se había detenido y comenzaba a latir con rapidez, el pánico comenzó a invadirlo, y el problema es que no se podía defender eran mayores y tenían más fuerza que él.

-Sí, definitivamente tenemos suerte – respondió Toga con una tétrica sonrisa - ¿Sabes, Midoriya? Hoy tuve un mal día así que me haces feliz que estes aquí para entretenerme.

Izuku intentó levantarse, pero Neito lo empujo de vuelta al suelo, haciendo que cayera de manera estrepitosa

-¿Qué quieres de mí? -preguntó Izuku, tratando de sonar valiente, pero su voz temblaba.

-Míralo, Monoma, está temblando – se burló Toga mientras se arrodillaba a su altura y sacaba entre sus ropas una navaja de bolsillo

Izuku se estremeció al observar el objeto en manos de Toga, sus ojos se llenaron de lágrimas y el color de sus mejillas desapareció

-Todavía no te hacemos nada Midoriya y mira como ya te pusiste – se burló Monoma

-No te preocupes – susurro Toga muy cerca del rostro – No te haremos nada... permanente, solo quiero ver que tan roja es tu sangre.

Izuku estaba paralizado por el miedo - Por favor... - susurró Izuku, su voz llena de desesperación. - Déjenme en paz...

Las lágrimas comenzaron a correr por las mejillas del peliverde haciendo que Toga y Neito soltaran una fuerte carcajada, les encantaba ver el sufrimiento del peliverde

-¡Oh Midoriya, eres tan patético, ya estas llorando – se burló Neito dándole una patada el estómago.

El peliverde se quejó por el dolor y se hizo un ovillo

-Hazlo ya Toga – ordenó el rubio incitando a su amiga para que usara el objeto conta el peliverde.

-¡Par de idiotas! ¡Déjenlo en paz!

Los agresores voltearon a donde escucharon la voz, vieron a hombre de cabello negro, lleno de tatuajes y algunas perforaciones en sus orejas y uno más en su nariz.

Monoma a pesar de que el recién llegado le causaba miedo, no se iba a dejar amedrentar por un extraño.

-¿Tu quién te crees para venir aquí y decirme que hacer? – Monoma soltó con seguridad.

La mirada del recién llegado se endureció, su voz salió muy baja y amenazante, combinado con su semblante y su aura gritaba peligro por todos lados.

-Yo, soy el novio del chico al que ustedes intentan lastimar – respondió avanzando para quedar frente a Monoma.

Toga viendo que el recién llegado estaba distraído con Monoma se lanzó sobre el con la navaja en mano

-¡Dabi! – grito Izuku

Pero Touya ni siquiera se preocupó, con un rápido movimiento tomo la muñeca de Toga con fuerza y le aplico una llave dejándola frente a él.

-Agrh – la chica se quejó de dolor

Monoma intentó golpear a Dabi, pero él era más fuerte y más rápido, sin problemas esquivo el golpe y le dio una fuerte patada en el estómago que lo mando al suelo.

Dabi soltó a Toga empujándola donde había caído Monoma

-Escúchenme bien, par de idiotas, ese chico al que les gusta molestar es mi novio, y aunque él se negaba a decirme quienes eran para darles una lección ya sé quiénes son, Toga Himiko y Monoma Neito, si vuelven a molestar a mi novio, sentirán la ira del heredero de las industrias Todoroki.

Los ojos de ambos se abrieron de par en par – ¿Eres Touya Todoroki?
El recién llegando no respondió rápidamente, camino hasta donde estaba su novio, lo ayudo a ponerse de pie y limpio un poco su ropa del polvo, tomo su mochila y metió el libro que el peliverde estaba leyendo.

-Si yo soy Touya Todoroki – confirmo con una sonrisa malvada – y su vuelvo a enterarme que han molestado a MI novio, no solo tendrán que rendirme cuentas a mí, sino también caerá todo el peso de mi familia y eso implica hundir las industrias de sus padres.

Monoma se puso de pie con dificultad y ayudó a su amiga a ponerse de pie, no esperaron más y los dos corrieron en dirección a los edificios, Touya espero a que esos dos se perdieran de vista, antes de girarse para ver a su novio, justo cuando limpiaba sus lágrimas con sus mangas

El pelinegro suspiro y se acercó a él para abrazarlo – Debiste decirle que somos pareja desde antes, Zu, así te hubieran dejado en paz hace tiempo.

-Pero no quiero meterte en problemas, Dabi – respondió Izuku separándose de sus brazos admirando esos tatuajes que lo volvían locos y luego mirara esos ojos azules – No quiero ser una carga para ti.

-Tu nunca serás una carga, te amo, y por eso quiero ayudarte, vamos a casa.

Izuku se dejó guiar subieron al auto de Touya hasta llegar al enorme penthouse que tenía Todoroki.

Cualquiera pensaría que Izuku Midoriya le temería a un hombre lleno de tatuajes y perforaciones, todo en ese hombre grita peligro, pero a Izuku eso lo volvía loco, por eso agradece al ser que decidió ponerlo en su camino.

Lo conoció en una reunión de trabajo, el padrastro de Izuku es socio activo de la familia Todoroki, a pesar de que era una reunión formal, Touya había llegado con su estilo rebelde y despreocupado, ese día llevaba sus percings y también un collar de picos.

Desde el primer momento en que sus miradas se cruzaron, Izuku sintió una conexión con Touya, esa aura intimidante y sus ojos azules que parecían ver a través de él, lo había dejado sin aliento.

Cuando los padres de ambos discutían sobre negocios, Touya tomo la iniciativa, no podía negar ese tímido chico que parecía esconderse detrás de su padre le había llamado la atención

-¿Qué hace un chico tan dulce como tun en un lugar donde los leones pelean por sus presas? – pregunto con una sonrisa de medio lado y coquetería.

Touya dejo al peliverde sin palabras era todo lo que en sus sueños quería y lo tenía frente a él

-¿Te gustaría acompañarme a otro lado más privado? – preguntó con coquetería.

Izuku asintió sin realmente haber escuchado realmente y se dejó guiar por el mayor, poco a poco su relación floreció, Izuku ama por completo el semblante de chico malo, y aunque algunos piensan que el peliverde no estaría cerca de alguien con esa pinta, realmente le encanta estar a lado de su novio.

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¡Segundo día! Espero les haya gustado