LIBRO DE LETRAS (RECOPILACION DE OS)

Cicatrices (Bakudeku) Cap 2

La nueva pareja no regreso a clases lo que resto de la semana, Katsuki se había encargado de justificar sus faltas diciendo que se habían enfermado luego de comer algo en mal estado, y al ser el hijo de los Bakugo nadie les diría nada.

Además, Katsuki también lo había hecho para que la mejilla y los demás golpes que tenía el peliverde se curaran como debía, durante esos días el cenizo procuro y le mostro el cariño que debió de haber recibido desde el inicio.

El sábado por la mañana, la mejilla de Izuku se había desinflamado casi por completo, ya solo quedaba un leve color verdoso que indicaba que estaba a nada de desaparecer, los demás golpes de su cuerpo comenzaron también a tener un mejor aspecto.

Katsuki se había levantado temprano como los demás días, para preparar el desayuno para los dos, así que ahí se encontraba preparando la mezcla para preparar unos pancakes que tanto amaba su novio, en unos momentos escucho ligeros pasos y el cenizo dirigió su mirada a la entrada de la cocina, donde venia caminando un somnoliento peliverde, Izuku durante todos esos días había estado usando la ropa de Katsuki, al ser más alto y con musculatura por el ejercicio que hacía, su ropa le quedaba grande y se podían ver un poco los hombros descubiertos.

-Buenos días, Zuzu -saludó Katsuki con una sonrisa, se acercó al peliverde para darle un suave beso en los labios -. ¿Cómo dormiste?

-Mucho mejor -respondió Izuku, con una tímida sonrisa, aun no podía creer que él y Katsuki ahora eran pareja -. Gracias por todo, Kacchan. No sé qué habría hecho sin ti.

Katsuki le revolvió el cabello antes de contestarle – No agradezcas, eres mi novio y mi novio merece lo mejor, de eso me encargaré, ahora vamos a desayunar, preparé pancakes, Izuku le mostro una enorme sonrisa

-Gracias, Kacchan, eres el mejor – respondió con un fuerte abrazo

-Lo que sea por la persona que amo – comentó mientras terminaba de poner los platos en la mesa.

Desayunaron en un silencio cómodo, disfrutando solo de la presencia del otro, hasta que se escuchó la puerta principal abrirse, al cenizo le extraño pues sus padres dijeron que llegarían ese día, pero hasta la noche.

-Katsuki, ¿Estas en casa? – se escuchó la voz de su madre

Izuku miró a su novio con algo de miedo, pero este solo se acercó para darle un beso en sus risos – Tranquilo la vieja te ama, así que saber que ahora eres mi novio la hará más feliz

Katsuki tomó de la mano a Izuku y lo llevó hasta la sala donde ya estaba la madre del cenizo.

-¡Oh! Tienes compañía, hace tiempo que no te veía Izuku – comentó Mitsuki mientras se acercaba para saludar al peliverde cuando notó su mejilla - ¿Qué te pasó? Katsuki ¿Qué le hiciste?

El cenizo iba a contestar cuando Izuku se adelantó – No fue Kacchan, estaba viendo el entrenamiento de basquetbol cuando el balón salió hacía mí y no pude esquivarlo – comentó intentando sonar creíble – Kacchan ha cuidado de mi para que no se vuelva a inflamar.

Mitsuki levantó una ceja, claramente dudando de la explicación, pero decidió no presionar más el tema en ese momento. – Bueno me alegra que mi torpe hijo te haya ayudado – respondió observando las manos unidas de ambos – así que ¿Cuándo formalizaron?

Izuku se puso demasiado rojo y se escondió detrás de su novio – Perdón señora Bakugo, yo sé que no soy suficiente para su hijo y que probablemente esperaba algo mejor para él, pero quiero que sepa que siempre lo he querido y cometí el error de no darme cuenta antes de que él sentía lo mismo por mí.

Katsuki se sintió mal pues en ese momento veía parte de las inseguridades que Keigo sembró en él, ya estaba planeando como se vengaría de él por menospreciarlo, por su parte Mitsuki se echó a reír y se acercó hasta donde estaba Izuku quien seguía dando disculpas y murmurando, tomo al peliverde por los hombros para llamar su atención – No seas negativo, cariño, siempre te he considerado parte de nuestra familia y saber que tienes domada a la bestia que es mi hijo, me hace feliz, y por favor, llámame Mitsuki, nada de señora Bakugo, te conozco desde que naciste – le guiño un ojo.

Izuku se sonrojo, pero sonrió tímidamente, - Gracias

-No me agradezcas hijo – le revolvió el cabello y se dirigió a su hijo – Mas te vale cuidarlo y tratarlo como se merece que yo no crie a un patán, ¿Entendido?

-Tsk, ¿acaso crees que yo haría algo contra la persona que amo? – preguntó molesto

Mitsuki asintió satisfecha – Bien entonces, ¿Qué hacen aquí? Vayan a divertirse es fin de semana y hace un bonito día para que ustedes estén encerrados aquí.

-Pero, Zuzu no tiene ropa, ha estado usando la mía y le queda grande, no puede salir de la casa así – objetó Katsuki, no es que no le gustará verlo con su ropa, pero no queria que alguien más lo viera.

-Bueno en ese caso, creo que tengo algo de tu ropa vieja, la iba a donar a la caridad la próxima semana, pero, que falten unos pantalones y una playera no hará mucha diferencia.

Un par de horas después Mitsuki despidió a los chicos en la puerta, se fueron en el auto de Katsuki rumbo al centro comercial, para pasar un rato, cuando llegaron, Izuku no sabía cómo actuar, con Keigo siempre tenía que tener la cabeza gacha, aunque iban tomados de la mano si el rubio no le decía nada se tenía que mantener así, callado o llegando a casa le daría una lección por no comportarse como debía.

El cenizo gruño y tomo a su novio por la cintura para obligarlo a caminar a su lado – Levanta la cabeza, amor, no tienes nada de qué avergonzarte o preocuparte conmigo a tu lado – susurro en contra su oído causando una extraña sensación – Eres mi novio y el mundo debe saber que yo ya tengo dueño, ¿de acuerdo?

Izuku asintió lentamente, aun no podía evitar comparar su anterior relación con la actual, con un poco de miedo levanto la mirada y vio la gran cantidad de personas que paseaban, comenzó a sentirse más seguro y comenzó a mirar las tiendas.

-¿Te gustaría que fuéramos a alguna tienda en particular? – preguntó Katsuki, con una leve sonrisa en los labios

Izuku lo observó un momento y asintió - ¿Podemos ir a la tienda de mangas? Quiero ver si ya tienen la nueva edición del manga de All Migth.

Katsuki asintió y comenzó a avanzar hasta la tienda, entraron y comenzaron no solo a buscar el volumen que Izuku queria si no también veían otras opciones, al salir Izuku tenía una enorme sonrisa mientras sostenía la mano de su novio con las dos suyas.

-¡Gracias Kacchan! no puedo esperar a llegar a casa y leerlo – comentó con felicidad pura.

-Vaya, Vaya, pero si es la zorra traidora – la voz de Keigo cargada de veneno se escuchó haciendo que Izuku se tensara.

La irá que estaba guardando para el lunes comenzó a salir, por inercia puso a su novio detrás de él.

-¿Qué demonios quieres, Keigo? – preguntó Katsuki con una voz baja y amenazante.

Keigo ignoró a Katsuki y se enfocó en Izuku - ¿Recuerdas que te dije que pasaría si terminabas conmigo?

Katsuki sintió como el peliverde dio un pequeño brinco y comenzó a temblar sin poder hablar, estaba seguro de que sus ojos se habían llenado de lágrimas. Así que reaccionó con enojo y conectó su puño contra la cara de Keigo haciendo que este cayera al suelo

-Atrévete a dirigirle la palabra una vez más o amenazarlo de cualquier forma y no tendré piedad de ti, Izuku es mío ahora yo si le daré el lugar que se merece.

- Maldito seas, Bakugo, - escupió Keigo, levantándose con dificultad el golpe le dejaría una marca.

-Te lo advertí, - comentó a Katsuki con voz ronca - aléjate de Izuku, ustedes ya no son nada y si intentas algo contra él todo el poder que tengo caerá sobre ti.

Katsuki queria agarrarlo a golpes en ese momento, pero se contuvo porque ya comenzaban a llamar la atención y lo que menos queria era exponer a su novio, lo tomó de la mano y salieron del centro comercial, dejando a Keigo en el suelo viéndolos con rabia.

-Esto no se quedará así, Bakugo – murmuro Takami mientras se ponía de pie – Izuku es mío y tu no me lo vas a quitar.

♡☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡ ♡☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡ ♡☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡ ♡☆♡☆♡☆♡☆♡☆♡

Este también será un fic corto de unos 4 máximo 5 capítulos, solo le daremos una lección a Keigo por meterse con Zuzu.