Un pequeño Harry Potter de 5 años termina siendo olvidado en su casa por un viaje que habían planeado sus tíos; sin saber que mas hacer aparte de buscar algo de comer, el pequeño Harry corre a la casa de su vecina de al frente para pedirle prestado...
Elizabeth sentía como si toda la habitación estuviera dando vueltas. Todo habia pasado en un instante y los fragmentos de la pelea se agrupaban en su cabeza sin tener un orden especifico.
Cuando ese extraño hombre estaba a punto de lanzarle ese rayo verde, su vecino Snape apareció junto a remus. Los dos no parecían sorprendidos de que un hombre disparara rayos de una simple vara. Después de quitarle la vara al hombre este empezó a gritar sobre algo referente a sangres sucia, traidores de la sangre pura, mestizos y de nuevo esa palabra: muggle.
Su vecino Snape le habia mandado a que se fuera a su casa rápidamente junto a Harry.
Ni siquiera supo como lo hizo, pero lo último que recordó, fue como su corazón casi se le salía de su pecho y que habia logrado llegar a su casa. Realmente algo malo estaba pasando. Debía llamar a la policía.
Así que con Harry aun en sus brazos empezó a llamar a la policía. Pero apenas pudo escuchar al otro lado de la línea la típica frase de la policía, el teléfono voló de sus manos y cayo rápidamente en su base colgando así la llamada.
Mirando al teléfono con sorpresa, se sobresaltó al escuchar a su vecino detrás de ella.
Será mejor que se siente srita maxwell. Seguramente no está en condiciones para estar parada y menos para cargar a un niño- Severus la miraba de forma tranquila como si nada de lo anterior hubiera pasado.
Pero Elizabeth no quería sentarse. Ni siquiera aflojo su agarre y ahora mirada de forma intranquila hacia severus y las otras dos personas detrás de él, remus y el hombre extraño que antes era solo un perro.
¿Qué rayos fue eso? ¿Por qué ese hombre quería atacar a Harry? ¡¿y que eran esos rayos?! dijo rápidamente sin siquiera recuperar el aliento. Pero viendo como las otras tres personas la miraban, una idea paso rápidamente por su mente- ¿Por qué ustedes no están asustados? ¿Ustedes saben que era eso verdad? ¿¡Por que no dicen nada¡?- lo último lo grito ya que esas personas ni siquiera se inmutaban ante sus preguntas.
Elizabeth podía sentir como todo habia empezado a dar vuelta y como sentía como si le faltaba el aire. Y antes de que todo se desvaneciera, vio como severus junto con remus corrían hacia ella y todo se volvió oscuro.
Cuando volvió a abrir los ojos, se dio cuenta que estaba en su habitación. Primero habia pensado que todo habia sido un mal sueño, pero cuando todo su cabello, sintió algunos mechos quemados y el olor chamuscado de estos, se sobresaltó. Pero no por saber que no habia sido un sueño, sino porque Harry no estaba con ella.
!HARRY¡
Corriendo fuera de su habitación y bajando hacia su sala, vio como Harry estaba sentado en el sillón de forma tranquila y delante de este se situaba un anciano con una túnica larga con un diseño elegante y un poco excéntrico, además de la larga barba blanca que adornada su rostro.
El anciano al verla bajar, le dio una sonrisa amable para luego llamarla.
Srita maxwell, es un honor por fin conocerla. Se que estas no son las mejores condiciones para presentarnos, pero espero que acepte mi agradecimiento por haber cuidado de Harry
Elizabeth seguía sin entender que estaba pasando alli.
¿Quién es usted? – pregunto Elizabeth mientras bajaba los escalones aun sin despegar su vista del anciano. Solo cuando estuvo a un lado de Harry, también se dio cuenta que su vecino Snape estaba al lado del anciano y que remus estaba en la cocina junto al otro hombre.
Perdone mi descortesía. Mi nombre es albus Dumbledore. Director del colegio Hogwarts de magia y hechicería.
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