𝓐𝓬𝓾𝓮𝓻𝓭𝓸 𝓭𝓮 𝓪𝓶𝓸𝓻 -𝓰𝓵-

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Dos semanas después

Pov.Eun-ji

Me sentía feliz Yuna caminaba junto a mi tomada de mi mano mientras nuestros pies tocaban la suave arena de la playa estábamos en vueltas en un silencio cómodo y a decir verdad nuestros pequeños avances me gustaban mucho, también descubrí nuevas facetas y cosas de Yuna como por ejemplo cuando algo le gustaba su ojos se cerraban y sus labios formaban una sonrisa o cuando tenía miedo sus dedos jugaban entre si evitando que su miedo tome el control o su forma de levantar sus cejas e inclinar su cabeza como un cachorro confundido cuando no entendía algo , y también encontraba muy atractivo el lunar que adornaba su cuerpo en la parte de la Ingle o el lunar en su cuello.

Tierra llamando a Eun-ji
A si dime qué paso.
Te pregunté si quieres subir en esa lancha e ir a ver ballenas.
Claro vamos camine hacia esa lancha junto a Yuna la lancha se puso en marcha yendo a lo más profundo del mar mi sorpresa fue muy grande al ver una ballena saltando a la superficie y nuevamente volviendo a sumergirse , mi vista se dirigió a Yuna para corroborar de que ella también la había visto ví a Yuna con una sonrisa gomosa viendo hacia donde la ballena ya se había sumergido mi vista de volvió nuevamente hacia el mar dónde Yuna apuntaba una ballena bajo nuestra lancha la ballena salió del agua muy cerca de nuestra lancha y volvió a sumergirse lo que provocó que mucha agua no salpicará Yuna soltaba risas de felicidad al estar toda mojada.

Viste eso Eun-ji lo viste verdad.
Si Yuna-Boo lo ví.
Nunca había visto una de tan cerca y se sintió mágico.
La verdad yo tampoco había visto una así de cerca y tienes razón fue mágico.
La próxima vez vendremos con Minho para que el también las vea después de un rato habíamos vuelto a la orilla hoy sería nuestro último día aquí después de eso volveríamos a nuestra cotidiana vida Luego de las ballenas fuimos a diferentes lugares, compramos obsequios ya se hacía de tarde y como sería nuestro último día aquí decidí hacer una cena en las orillas del océano .
Eun-ji tienes hambre.
Un poco y tú.
Tambien.
Entonces vamos a dejar esto en la cabaña y preparemos nuestra cena te parece.
Si me parece perfecto.agarre su mano y empezamos a caminar tomadas de la mano hacia nuestra cabaña al llegar ella dejo las compras que habíamos y se puso a mi lado para pensar que podríamos cocinar.
Y que te parecen unos ravioles en salsa Pomodoro.
Y si mejo vienes conmigo.
A dónde quieres ir.
Usted solo sigame señorita.
Como guste Yuna empezó a caminar fuera de la cabaña yo solo seguía sus pasos caminamos por diez minutos ella vendo mis ojos.
Confia en mi?.
Si señorita confío plenamente en usted.
Agarre su mano y empecé a caminar hacia la orrila de la playa ahí se encontraba una tienda de telas con una mesa y patos servidos con suma delicadeza y elegancia.
Quitare la venda de tus ojos.
Wow Yuna-Boo esto ya muy hermoso.
Gracias Gracias lo hice yo solita.
Te quedó muy bonito.
Toma asiento.

Mientras el ocaso ilumina el cielo con tonos dorados y rojizos, la pareja cena en silencio a orillas.
El suave sonido de las olas rompiendo contra la arena es el único ruido que llena el ambiente, acompañado por el canto de las cigarras y la relajante brisa marina, a la luz de las velas.

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Cuando estuvieron listas para regresar a su cabaña después de cenar, la pareja recogió sus pertenencias y se encaminaron por la noche. La luna llena y las estrellas iluminaban su camino y la suave brisa nocturna refrescaba su rostro. Aunque estaban un poco cansadas, se sentían contentas y complacidas por la cena y la compañía de la otra mientras regresaban a su cabaña para disfrutar de un merecido descanso, para el día siguiente para su regreso a Corea.