The Walking Dead 1 TEM / Rick Grimes y Zaira Sterling

.3.

Pasado el tiempo...

Con las personas que conocí en el tráfico, decidimos agruparnos y mantenernos alejados de las autopistas, ya que la ciudad desapareció con esa explosión...

Por lo poco o mucho que sé, Rick recibió un disparo en la espalda, y estuvo mucho tiempo en coma. Shane, un antiguo conocido de mi familia y mío, me contó eso... que murió. Me dolió mucho saberlo. Creo que, a pesar de haber dicho tantas veces que lo odiaba, no puedo hacerlo. Sobre todo cuando sé que mi hija nunca tuvo la oportunidad de conocer a su padre, ya que ahora no regresará.

En cuanto a Lori, nuestra relación no es linda ni mucho menos amable, pero por lo menos, como dos mujeres adultas, tratamos de mantenernos al margen para que eso no afecte a nuestros hijos, quienes son buenos amigos, al igual que con la hija de Carol.

El campamento, por lo menos, está compuesto por muchas buenas personas. Conocí a Glenn, un buen muchacho, y por cariño nos consideramos madre e hijo. A pesar de que siempre le digo que no soy tan mayor, él me sigue viendo así. También está Daryl, un tipo complicado, pero con quien he establecido una buena amistad. Andrea y Carol también se han convertido en grandes amigas, aunque nos haya tocado vivir todo esto juntas.

Un día, necesitábamos más suministros para el campamento, y yo tenía que buscar medicamentos para Ari. Ya se me habían acabado la mayoría, y quería estar preparada por si las dudas.

—Mami, ¿pero es necesario que vayas? —dijo Ari con preocupación.

—Sí, hija. No voy a mandar a los demás a arriesgarse por algo que es solo para ti —le respondí, mientras alistaba algunas cosas en mi mochila.

—Mami, pero trata de cuidarte, ¿sí? —dijo, abrazándome fuerte.

—Sí, pequeña, lo haré. Haz caso a Carol, ¿sí? No me demoraré —le di un beso en la frente y me fui junto a los otros.

Después de esa pequeña despedida con mi niña, me fui decidida a traer lo que necesitábamos. Mentalmente hice una lista de lo que debía encontrar.

ENCUENTRO DE NUESTROS PERSONAJES

Estaba en uno de los pisos del centro comercial, llenando una maleta con medicamentos, cuando escuché gritos abajo. Me apresuré a terminar y bajé corriendo.

—¿Qué sucede? ¡¿Por qué tantos gritos?! ¡Cállense! —dije, molesta, ya que los ruidos atraen a los caminantes.

—Nada, este idiota disparó por las calles y está atrayendo a más de los que nos quieren matar —dijo Andrea, claramente furiosa.

—No fue mi intención, ¿sí? Solo trataba de defenderme —dijo un chico, al que todavía no había visto el rostro.

A pesar de no haberlo visto todavía, esa voz tan característica para mí era inconfundible. Sabía muy bien de quién provenía...

—Sí, se nota que tratas de matarnos —dijo Andrea, apuntándole con un arma.

—Andrea, no hagas eso, ¿sí? Déjalo —le dije, acercándome para quitarle el arma y guardarla.

—Estaba con el seguro. Primero, para apuntar a alguien, debes aprender a usar un arma correctamente —el dijo.

—Primero aprende a cerrar la boca cuando eres un desconocido en un lugar como este —dije, volteándome para mirarlo.

Ambos nos quedamos atónitos al vernos directamente a los ojos. No maldigo haberlo visto, pero sí las locas circunstancias en las que ocurrió nuestro reencuentro, tan desafortunado...

—Zay... —dijo él, acercándose lentamente hacia mí.

—Sí, Rick, soy yo —respondí, alejándome junto a Glenn para seguir revisando cómo iban las cosas.