El bien en el mal

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Tal como Aziraphale lo supuso, sus padres llegaron a la escuela buscando cortar cabezas, exigiendo respuestas inmediatas y sobre todo al culpable de tal daño hacia su hijo, sin embargo en toda la discusión con directivos y otros profesores nadie podía decir exactamente que fue lo que ocurrió más que los mismos alumnos presentes. A cada uno se le preguntó y todos coincidían en lo mismo, con más o menos detalles: "Fell solo defendió a un compañero y el profesor lo tomó muy mal, pero la verdad es que siempre fue muy hostigante con él, creo que era algo personal" " En cada clase no dejaba de molestarlo, nisiquiera es un mal alumno ¿por que tratarlo así? Seguro que solo buscaba un pretexto para agredirlo". Pero la versión más importante sería la de los dos principales afectados, por fortuna Crowley tenía más que la gracia confianza de los señores Fell, y junto a Aziraphale lograron dar los hechos algo retorcidos.

Unos minutos después de que Crowley hubiera dejado a Aziraphale, volvió con su mejor intento de disfraz angelical, listo para preparar la actuación de su vida en cuanto llegarán para hacer preguntas.

-¿De donde sacaste esa ropa?-

-De los de teatro, tengo dos... mmm ¿conocidos?- (Palabra que usaba para no evidenciar que eran algunos de los alumnos que le llegaron a comprar marihuana).

Realmente su atuendo no era nada del otro mundo, solo cambió sus jeans por unos claros y se puso el suéter más feo que le encontraron en una caja, para su cabello esponjado y rebelde tuvieron que ponerle una buena capa de fijador y tejerle una apretada trenza, en cuanto los lentes se dejó los suyos, no llevaba las lentillas café y temía que ese color tan peculiar le diera ese aire "diabólico" que su madre odiaba del él.
Aunque bien pudo no necesitar nada de eso, en cuanto la señora Fell vio a su hijo herido, corrió hacia él y se olvidó de todo a su alrededor, era una mujer estricta y dura pero ante todo sobreprotectora, en especial con el más pequeño de sus hijos, aunque fuese quien más angustias y molestias le causaba.

-¡Es totalmente inaceptable, es un horror que un adulto pueda hacer esto!-

Crowley rodó los ojos.

-Ya mamá, por favor, estoy bien-

-¡¿COMO VA AESTAR BIEN?! MIRA COMO ESTÁS, ESTO VA A RESULTAR EN LAS ULTIMAS CONSECUENCIAS, DIME EXACTAMENTE QUE PASÓ-

-Pues perdió la razón, él dijo algo que estaba totalmente fuera de lugar... algo que no se le debe decir a otra persona... y no me pareció justo-

-¿Que puede ser tan grave que tengas que meterte Aziraphale?-

Aziraphale no quería repetir nunca más aquello, no le importaba si por el resto de su vida lo castigaban, él ya no iba a tocar ese tema a nadie. Permaneció en silencio y desvío la mirada.

Sintiendo la frustración del resultado de inculcar tan buenos modales se giró hacia Anthony con una cara casi suplicante pero también algo severa.

-Ah, verá, es un tema muy delicado en verdad... ejem... éste compañero ha tenido una situación dura, por decirlo así... sus padres... bueno ellos... fueron bastante violentos con él y el profesor Gabriel no era ajeno al tema, aún así decidió mofarse con dolo sobre dicha situación... considero yo, bastante impropio de Aziraphale el responder, pero también creo que es muy valeroso defender a los débiles de alguien que esta abusando de su autoridad- Le sonrió al rubio con una gratitud y ternura que nunca había logrado expresar.

-¿Eso pasó, Aziraphale?-

-Si... pero no quise ser grosero, no podía quedarme callado sabiendo lo que eso significaba...-

-Ya, no quiero oír más, voy a ir con tu padre y voy a decirle lo que me acaban de contar, cuando regrese por ti vamos a ir al hospital y de ahí a casa, no más actos heroicos ¿Entiendes? Y lo siento Anthony pero creo que ya solo se verán en la escuela, por el momento solo saldrá de casa para venir aquí-

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⏰ Última actualización: Oct 31 ⏰

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