Prólogo.

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Mi nombre es Javier. 

Javier significa sanar o restaurar, pero no tiene nada que ver con mi vida. O al menos no ha tenido que ver todavía. 

Soy un chico que no ha tenido muchos beneficios en cuanto a lo económico, pero, si hablamos de lo mental, soy casi tan inteligente como el maldito Favaloro. Quien, de hecho, es uno de mis ejemplos a seguir. 

Desde pequeño y ates de que nazcan mis hermanos, mamá me enseñó que para ganarse la vida hay que trabajar duro, con la mente lejos de las drogas, el alcohol y todo lo que se le ocurra en el instante que me lo está diciendo. 

Gracias a mis conocimientos, el año pasado me llegó una beca para empezar a estudiar en u colegio increíble: CDO. Quienes lo conocen, sabrán que su significado es "Cuidador de orquídeas".

Personalmente, supongo que las orquídeas somos los estudiantes y, al ser un publico que constantemente se renueva, nos pusieron ese nombre. Si no es por eso, no sé por qué más puede ser. 

El colegio se divide en dos partes, femenino y masculino. Los estudiantes tienen una habitación compartida a su nombre y una lista de deportes semanales de ensueño: canotaje, futbol, rugby y tenis.

Sin duda, lo mejor que te puede suceder en la vida. 

OrquídeasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora