10: Los Tríada

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Era jueves por la noche y un Alfa estaba terminando de empacar algunas de sus pertenencias, las cuales necesitaría los próximos tres días.

–Zuzu, ya es tarde, mejor vete a dormir, yo solo puedo terminar la maleta– Dijo el rubio mientras acariciaba con suavidad la mejilla del mencionado.

–Te agradezco por la invitación Kacchan, pero yo te quiero ayudar a terminar de empacar, igualmente ya falta poco para poder acabarla– Contestó el peliverde, rechazando gentilmente la invitación que le habían ofrecido.

Katsuki había decidido que le daría un tiempo a Izuku para que él le volviera a confirmar lo que le había dicho el día de ayer, no quería forzar las cosas, lo que quería era que el pecoso se lo dijera con honestidad. La verdad era que no podía explicar lo que había sentido en el instante que el de ojos esmeralda le dijo que él también sentía que él era su destinado, en ese momento el de ojos carmesí sintió una mezcla de todas las emociones positivas, su Alfa interno aulló de felicidad, por primera vez sintió que alguien lo amaba de verdad románticamente y esas eran cosas que jamás había sentido.

–¿Estás bien, Kacchan?–Preguntó él de menor estatura– Te noto un poco distraído.

–Si, si estoy bien, gracias por preocuparte, Deku– Respondió el más alto mientras empacaba la última camisa que quedaba.

Pocos minutos después la pareja terminó de empacar todo lo que faltaba.

El Alfa se acostó en la cama y le dio unas palmaditas al colchón en señal para que el Omega se acostara a su lado.

–Estoy cansado– Dijo el peliverde, acurrucados en las cómodas sábanas mirando a la pared.

–No lo estarías si me hubieras hecho caso y te hubieras ido a dormir antes– Contestó el de cabellos rubios mientras apagaba la lámpara que anteriormente alumbraba tenuemente el cuarto.

El pecoso solo respondió con un aburrido "Mhm".

–Descansa, cariño.

Después de que el Yakuza dijera eso, la habitación se quedó en silencio por unos minutos.

–(¿Será que si se lo pido? Esta es la última vez que lo podré ver hasta el lunes)– Pensó Izuku mientras se volteaba y veía la espalda de Katsuki –(¿Estará despierto?).

En ese momento el pecoso se armó de valor para poder hablar, le daba vergüenza.

–Kacchan, ¿te puedo pedir algo?– El menor no recibió ninguna respuesta– Debe de estar dormido...– Susurro.

–Dime Deku, que necesitas– Respondió el mayor volteandose para ver al mencionado.

–Kacchan, esta noche tu– El de ojos esmeralda suspiro, lo iba a decir.

–(¿Me va a pedir lo que creo que es? Carajo, espero que sí)– Pensó el de ojos rojo carmesí poniendo mucha atención en lo que le iban a pedir.

–¿Esta noche podemos acurrucarnos? Perdón por molestarte– Dijo el pecoso levantando la mirada.

–Claro que sí, yo encantado – Contestó –(Pensaba me iba a decir que queria tener sexo, acurrucarse no esta mal, pero mierda, ya me exite, me toca aguantarme, como las otras mil veces que lo he hecho, ademas, si pude aguantar mi celo es obvio que puedo aguantarme esto).

La pareja se acercó y se abrazaron.

–Kacchan– Le respondieron con un "Mhm" como de costumbre –, hueles un poco diferente, hueles como si– El Omega abrió sus ojos en grande y miró directamente al Alfa –, no me digas que estas exitado, ¿¡que pensabas que te estaba proponiendo!?

Doce Meses (Katsudeku/Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora