Los hijos de Lucifer. (RadioApple)

Ella es mi hermana.

Mientras tanto en el infierno era un día como cualquier otro.

La familia Morningstar estaba desayunando de lo más normal.

Alastor — ¿Durmieron bien?

Charlie — Sip

Alastor — ¿Samael?

No responde.

Lucifer — Samael tu padre te está hablando

Samael — ¿Realmente te importa o simplemente preguntas por qué estoy aquí?

Alastor — ¿A quién le vienes a hablar de esa forma?

Charlie — Samael cálmate

Samael — Todos ustedes me tienen harto, Charlie es la única que tiene toda su jodida atención en esta casa.

Lucifer — Mi amor eso no es así...

Alastor — Samael no digas estupideces.

Samael — Claro si para ti es todo una puta estupidez.

Alastor — No digas groserías en la mesa.

Samael — ME IMPORTA UNA MIERDA LA PUTA EDUCACIÓN QUE QUIERAN TENER A ESTA MALDITA CASA, TODOS USTEDES SON UNOS HIJOS DE PUTA.

Alastor se levantó y agarró el brazo de Samael.

Samael — Suéltame.

Lucifer — Alastor...

Charlie — Sam...

Alastor — Jamás te has comportado así.

Samael — QUE ME SUELTES.

Alastor al no hacerle caso a este cambió de forma a una serpiente y se fue de la casa pasando bajo la puerta.

Alastor — ¡SAMAEL!

Lucifer — No puede ser...

Alastor — Si tan solo no hubiera heredado tus habilidades esto sería mucho más fácil.

Lucifer — Se llama genética Alastor y te recuerdo que también heredó las tuyas, es más poderoso de lo que tú y yo podemos llegar a pensar.

Alastor — Es lo mismo, mientras no sepa el gran potencial que tiene por ahora.

Lucifer — Deberíamos ir a buscarlo

Alastor — Deja que se le pase, en adolescentes es normal.

Lucifer — Pero no está bien Alastor, piensa que no le damos atención...

Alastor — A ver mi amor no te preocupes, cuando regrese hablaremos con él y trataremos de arreglar esto si?

Lucifer — Está bien...(Lucifer no está muy convencido en esperar a que llegue)

Samael volvió a su forma normal y empezó a caminar por las calles del infierno.

Samael — Estoy harto de que todo sea Charlie Charlie y Charlie, el hijo biológico de ambos soy yo puta madre... — Agachó sus orejas y la mirada por la pena de decir tal cosa refiriendose a su hermana —

Mientras tanto en el cielo.

Leroy — ¿Estás listo Azrael?