Lyra Blair Black, o más bien Weasley, va a entrar a su primer año en hogwarts en el que conocerá a muchísimos nuevos amigos y forjará su reputación en hogwarts ayudando a Harry a salvar la piedra filosofal.
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Todos estaban impacientes de que empezaran las vacaciones. Mientras que en el Gran Comedor tenían las chimeneas encendidas, los pasillos, llenos de corrientes de aire, se habían vuelto helados, y un viento cruel golpeaba las ventanas de las aulas.
Lo peor de todo eran las clases del profesor Snape, abajo en las mazmorras, en donde la respiración subía como niebla y los hacía mantenerse lo más cerca posible de sus calderos calientes.
La sala común de Slytherin también se había vuelto mucho más fría de lo habitual ya que estaba situada también en las mazmorras de Hogwarts al igual que la clase de pociones, que fuera tan fría para verano estaba genial, sin embargo ahora en invierno lo único que les salvaba era la chimenea que al igual que en el gran comedor estaba encendida.
Lyra y Daphne estaban en su sala común ambas tratando de terminar de envolver los regalos navideños que las quedaban por preparar, la pelirroja se había quedado abajo cortando el papel mientras la rubia había subido a su cuarto a por un par de mantas para estar más calentitas.
-Aquí están -dijo Daphne con una sonrisa tirándolas al sofá mientras volvía a sentarse junto a su amiga y ambas se tapaban.
-¡Por Merlín, que agusto, Gracias Daph!
-¿Al final conseguiste ese regalo que te faltaba? -preguntó envolviendo lo que parecían ser una bonita muñeca, que si Lyra no recordaba mal, la había comprado para su hermana pequeña -las cartas para tu amigo.
-Si que las conseguí, están ya envueltas -dijo Lyra recordandolo todo con una sonrisa -la verdad fué más fácil de lo que pensaba...
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-Claro que te ayudamos Ly -dijeron ambos gemelos al unísono con una sonrisa divertida mirando a su hermana pequeña.
Ambos chicos estaban preparados y abrigados para ir a Hogsmeade ese día, ninguno de sus compañeros de cuarto estaban ahí, ninguno menos Lee Jordan, que al ser el mejor amigo de ambos chicos y su compañero de bromas les ayudaría encantado a colar a Lyra en Hogsmeade.
La chica sonrió orgullosa de sus hermanos, que aunque tenía claro que la ayudarían, aun así le pareció un gesto bonito de su parte.
-Bien, pues cuando vayamos a irnos yo me transformaré en un gato y...
-¿En un gato? -preguntó Lee sorprendido en ese momento interrumpiendo su explicación del plan -¿Eres animaga, como Mcgonagall?
-Animaga no, soy metamorfomaga -especificó con una sonrisa, su extraña condición era algo de lo que Lyra no solía alardear, pero le encantaba serlo y le venía genial para muchas de sus bromas o simplemente para librarse de diversas situaciones o regaños -bien pues una vez que me haya transformado me metéis en vuestra mochila, he hablado con mi amiga Daphne para que me cubra en las clases diciendo que estoy enferma y durmiendo para descansar en mi cuarto, por desgracia la profesora Mcgonagall me ha visto y si se entera va a saber que tengo algo planeado entre mis manos, pero gracias a Merlín hoy no me toca clase con ella...
