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| ❀ Capítulo doce: JM ❀ |

—Jimin, Jimin. Despierta.

—¡Ahg, Minnie! Me aburro.

—Ya dormiste mucho tiempo. Tres horas. ¿Cuánto más necesitas descansar?

—Quiero hacer algo. ¡Me aburro!

Abro los ojos y lo único que siento es el peso de Jungkook sobre mí. ¿Qué está haciendo ahora?

Hace rato escucho su voz quejándose de lo aburrido que se encuentra. No me ha dejado dormir tranquilo.

—Cuando dije que sería buena idea venir de vacaciones aquí, no era para que tú durmieras tanto —dice en un susurro—. Era para que saliéramos a pasear y la pasáramos bien.

Ni siquiera se ha dado cuenta de que estoy despierto. Él está hablando solito, echado sobre mí como si pesara solo dos kilos.

—¿Puedes salir de encima mío? —le pregunto con voz ronca—. Por favor.

Jungkook levanta la cabeza y me mira con ojos bien abiertos y una gran sonrisa.

—¡Por fin! —Se ríe—. Me estaba aburriendo mucho sin ti.

Me estiro y él se recuesta a mi lado. Parece más inquieto que nunca e incluso se lo ve emocionado.

—¿Dormiste algo?

Afirma.

—Treinta minutos. No soy fan de las siestas —me recuerda, ansioso—. Mientras dormías, aproveché para investigar sobre los lugares que podríamos recorrer aquí en Tokio. Intenté ver la tele, pero está todo en japonés.

No puedo evitar reír.

Es tierno, es muy tierno cuando está inquieto.

—¿Qué lugares quieres recorrer? —le pregunto, curioso.

Tomo asiento en la cama y restriego mis ojos. Lo observo con atención, él respira profundamente y me cuenta:

—Hay un museo donde tienen muchas luces de colores y flores hermosas. También me gustaría que visitemos el parque nacional y Disney.

Le sonrío.

—¿Todo eso lo haremos hoy?

Él niega con una sonrisa inocente y dulce.

—No, mañana también. Tenemos dos días antes de ir a Kioto, debemos aprovechar el tiempo al máximo. —Se acerca hasta mí y me da un beso en la mejilla—. Así que arriba, tenemos que ir a visitar varios lugares.

Me extiendo hacia él y le doy un beso en los labios. Jungkook coloca sus manos en mis mejillas con delicadeza y suavidad.

Desde que llegamos a Japón, estoy intentando cumplir con mi promesa de actuar como su novio. No me cuesta, tampoco me siento incómodo. Es extraño, pero incluso me resulta divertido cómo podemos hacer esto sin problemas.

Creo que se trata de una autoconvicción que vengo procesando y gestando hace varios días. Desde que Namjoon habló conmigo, no dejo de pensar en que Jungkook siempre ha sido un hogar para mí.

Esto no quiere decir que las cosas sean más sencillas. Dentro mío aún existe una pizca de inseguridad y nerviosismo que me hace dudar de qué tan buena idea es esto. Comprendo que gracias al tiempo que llevamos conociéndonos existe una gran confianza y amor entre nosotros, pero eso no significa que jugar a ser pareja no pueda afectar la percepción que tenemos el uno del otro.

Es complejo y bastante difícil, aun así, creo que no existe nadie que pueda cumplir mejor el rol de papá que Jungkook. Quiero tener un cachorro de él y sí, quizás tengo miedo de salir herido en el proceso, pero a este punto del plan no puedo volver atrás.