La librería-café de Israel y Santiago se convirtió rápidamente en un punto de referencia en su comunidad, pero la expansión de su sueño no se detuvo allí. Siempre innovadores, comenzaron a explorar cómo podrían conectar su proyecto con una audiencia más amplia a través de internet. Fue entonces cuando descubrieron Discord, una plataforma que les permitiría crear una comunidad virtual en torno a su librería-café.
Una noche, mientras organizaban los eventos de la semana, Santiago miró a Israel con una chispa de emoción en sus ojos.
—Horse, ¿alguna vez has oído hablar de Discord? —preguntó.
Israel levantó una ceja, intrigado tanto por el apodo nuevo como por la pregunta.
—Primero, ¿por qué me llamaste Horse? —preguntó, riéndose—. Y segundo, sí, he oído hablar de Discord. Es esa plataforma donde la gente se reúne para chatear, ¿verdad?
Santiago sonrió y se encogió de hombros.
—Es un apodo cariñoso. Me gusta cómo suena. Y sí, Discord es perfecto para crear una comunidad. Estaba pensando que podríamos abrir un servidor para nuestra librería-café. Podríamos organizar clubes de lectura virtuales, noches de juegos y tener un espacio donde nuestros clientes puedan interactuar con nosotros y entre ellos.
Israel asintió, ya acostumbrado a los inventivos nombres que Santiago solía inventar para él.
—Me gusta la idea, Santiago. Podríamos conectarnos con personas que aman los libros y el café, incluso si no están cerca. Vamos a hacerlo.
Pasaron las siguientes semanas configurando su servidor de Discord. Crearon canales específicos para diferentes actividades: un canal para discusiones sobre libros, otro para recomendaciones de café, y otros para eventos especiales. También organizaron un canal general donde los miembros podían conocerse y compartir sus intereses.
El servidor de Discord fue un éxito inmediato. Los clientes habituales de la librería-café se unieron, y pronto comenzaron a llegar personas de todo el mundo. La comunidad creció, y las discusiones sobre libros y café se volvieron vibrantes y diversas. Israel y Santiago organizaron sesiones de lectura en línea, donde los miembros del servidor podían discutir sus libros favoritos y compartir sus opiniones.
Una noche, mientras moderaban una animada discusión sobre una novela de misterio, Santiago se dirigió a Israel a través del chat de voz.
—Horse, ¿has visto cuánta gente se ha unido esta semana? —preguntó, su voz llena de entusiasmo—. Esto está creciendo más rápido de lo que esperaba.
Israel sonrió, disfrutando del nuevo apodo.
—Sí, es increíble. Me encanta ver a tantas personas apasionadas por los libros y el café. Hemos creado algo especial aquí, Santiago.
La comunidad de Discord no solo fortaleció su negocio, sino que también les brindó nuevos amigos y conexiones. Una de las actividades más populares del servidor fue la noche de juegos, donde jugaban trivia de libros y competiciones de escritura. Estas noches no solo eran divertidas, sino que también ayudaban a fomentar un sentido de camaradería entre los miembros.
Una noche, mientras jugaban una partida especialmente intensa de trivia literaria, Santiago se rió y bromeó con Israel.
—Horse, estás perdiendo terreno. ¿Cómo es posible que no sepas quién escribió "Cien años de soledad"?
Israel se rió, disfrutando del juego y la compañía.
—Tal vez lo estoy haciendo a propósito para darte una oportunidad, Santiago.
La broma ligera y la risa compartida reflejaban la cercanía y la complicidad que habían desarrollado a lo largo de su relación. El apodo "Horse" se convirtió en una parte querida de su interacción diaria, y cada vez que Santiago lo usaba, recordaba a Israel lo especial que era su vínculo.
A medida que el servidor de Discord crecía, también lo hacía la reputación de su librería-café. Pronto, comenzaron a recibir invitaciones para participar en podcasts y entrevistas en línea sobre su proyecto y cómo habían utilizado la tecnología para conectar a las personas. Su historia inspiraba a otros emprendedores a pensar fuera de la caja y a encontrar nuevas formas de alcanzar a su audiencia.
Una tarde, después de una entrevista particularmente exitosa, Santiago miró a Israel con orgullo.
—Horse, nunca imaginé que nuestro pequeño proyecto llegaría tan lejos. Estoy muy orgulloso de lo que hemos logrado juntos.
Israel lo abrazó, sintiendo el mismo orgullo y gratitud.
—Yo también, Santiago. Y sé que esto es solo el comienzo. Hay tanto más que podemos hacer juntos.
Con la comunidad de Discord como una extensión digital de su librería-café, Israel y Santiago continuaron innovando y expandiendo su sueño. Su conexión, tanto personal como profesional, se fortalecía con cada desafío superado y cada nueva aventura emprendida. Juntos, demostraron que con amor, creatividad y perseverancia, no hay límites para lo que se puede lograr.
