Javier Hernández un joven que desde hace 12 años ha vivido encerrado, triste y solitario, mientras que Cristiano vive en Portugal cargando con melancolía y recuerdos de un antiguo amor.
Después de dos días Javier fue dado de alta, Guillermo fue al hospital para llevar a su hermano a la casa de su padre, ya en casa Luis lo recibió junto a Lionel y Julián.
- Tío Javi. - Julián corrió a abrazarlo. - ¿cómo te sientes?
- Hola Juli, estoy bien mi niño. - Javier sonrió viendo a su sobrino.
Todos subieron a la nueva habitación de Javier para que pudiera descansar.
- Juli, vamos a jugar en el jardin. - Lionel salió de la habitación junto a Julián para que Guillermo, Luis y Javier pudieran conversar.
La conversación fué interrumpida por que llamaron a la puerta y era Cristiano, el cual había ido a ver a Javier, decidieron dejar la conversación para después.
- Hola Javi. - Cristiano entró a la habitación y le dió un beso en la frente a Javier.
- Cris. - Javier estaba feliz de verlo ahí junto a él. - ven sientate.
Javier sonrió y lo miró, Cristiano se sentó junto a él en la cama, habían pasado varios años pero su amor era enorme y parecia que nunca se separaron.
- Javi, quiero saber todo lo que pasó. - Cristiano se lo pidió mientras lo abrazaba. - dimelo, no quiero que sigas guardando tanto dolor y sufrimiento.
- Pasaron tantas cosas, unos días después de que nos vieramos por ultima vez me llegó una carta, decía que tú no me amabas que solo jugaste conmigo y después una amiga tuya fue a mi casa, estaba muy alterada, me dijo que tuviste un accidente y que habías muerto y me lo creí. - dijo mientras unas lagrimas salian de sus ojos. - y lo peor vino después.
Cristiano lo escuchaba y estaba atento a cada palabra que decia Javier. - es casi lo mismo que me hicieron a mi, en mi casó te busqué y me dijeron que falleciste por un accidente, no lo recuerdo muy bien, me alteré al enterarme y no logro recordar a la persona que me dijo eso, era una mujer pelinegra, creo que me dijo que era tú mamá, pero no era Sandra.
- Cris, dos meses después de que me dijeron que habías muerto, yo... - el recordar todo eso le dolía a Javier. - yo me enteré de que estaba embarazado.
Cristiano quedó en shock al enterarse de esa noticia. - ¿qué pasó con...
- Lo traté de ocultar, tenía miedo y era muy joven pero cuando tenía casi cuatro meses mi mamá se dió cuenta, me obligó a abortar, yo no quería y me negué. - Javier estaba llorando al recordar todo. - pero no lo aborté, nos dijeron que por el tiempo del embarazo no se podía, en ese momento Sandra se volvió loca, me llevó a una hacienda en Guadalajara y se inventó que yo me había ido a un internado en España, ahí pasé todo mi embarazo.
Cristiano estaba llorando al enterarse de la verdad y de todo lo que tuvo que pasar Javier. - ¿Y nuestro bebé?
- Fue una niña, le puse Valeria, pero nació muerta, la doctora me dijo que era por mi edad. - la pareja lloraba. - y desde es momento mi mamá me mantuvo encerrado y alejado de mi familia, entré en depresión pero eso no le importó, ella me dijo que todo era por mi bien y que lo que pasó con Valeria era un castigo.
- Perdoname, todo este tiempo estuviste sufriendo y yo pude hacer nada. - Cristiano lloraba de la impotencia y rabia que le tenía a Sandra.
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