Unas semanas después de la salida al parque, Martina decidió poner en marcha su plan. había notado que Javier siempre salía del colegio a la misma hora y decidió seguirlo para descubrir más sobre su vida personal, ese día, después de las clases, esperó pacientemente fuera del colegio, observando desde lejos hasta que vio a Javier salir.
Martina siguió a Javier desde el colegio, manteniéndose a una distancia segura para no ser descubierta, lo vio caminar tranquilamente, pero con una ligera prisa en su paso, finalmente, Javier llegó a su casa, una vivienda que reflejaba elegancia, pero que para él carecía del calor que debería tener un hogar, al entrar por la puerta, fue recibido por su madre, Sandra, quien lo saludó con un tono distante.
- Hola, Javier - dijo Sandra sin siquiera levantar la vista de su teléfono.
- Hola, mamá - respondió Javier con una mezcla de resignación y educación, sabía que su relación con Sandra siempre había sido distante, ella estaba más enfocada en su vida social y profesional que en su hijo.
- ¿Cómo te fue en el colegio? - preguntó Sandra, más por cumplir con la formalidad que por verdadero interés.
- Bien. - fue la respuesta de Javier antes de dirigirse rápidamente a su habitación, deseando escapar de la frialdad de su madre.
Martina, que había observado toda la escena desde la distancia, sonrió para sí misma. Esta era su oportunidad. Esperó unos minutos hasta asegurarse de que Javier estaba dentro, luego se acercó a la puerta y tocó el timbre.
- ¿Puedo ayudarla en algo? - preguntó Sandra con frialdad.
- Buenas tardes, señora. Soy Martina Ferreira, una amiga de Javier ¿podríamos hablar un momento? es sobre algo importante. - Martina sonrió amablemente, aunque en su mente ya tenía claro lo que iba a hacer.
Sandra, algo intrigada pero sin mostrarlo, asintió y le indicó que la siguiera, llegaron a una pequeña cafetería cercana, un lugar tranquilo y discreto, se sentaron en una mesa en la esquina, y después de pedir sus bebidas, Martina no perdió el tiempo.
- Martina, ¿de qué se trata todo esto? ¿Javier está bien? - preguntó Sandra, un poco preocupada, pero más por cómo esto podría afectarla a ella que a su hijo.
- Señora Sandra, lo que voy a decirle puede que le sorprenda, pero creo que es importante que lo sepa - comenzó Martina, calculando cada palabra cuidadosamente. - he notado que Javier ha estado muy cercano a un chico del colegio, Cristiano, ellos... están saliendo, son novios desde hace varios meses.
Sandra la miró con una mezcla de sorpresa e irritación, más preocupada por las implicaciones sociales de lo que estaba escuchando que por el bienestar emocional de Javier. - ¿qué? ¿Javier está saliendo con un chico? ¿y por qué nunca me lo mencionó?
- Sé que puede ser difícil de creer, pero es la verdad, ellos pasan mucho tiempo juntos, y Javier parece estar completamente enamorado, pero... - Martina hizo una pausa estratégica, inclinándose un poco hacia adelante para mostrar mayor seriedad, quizás esto le sorprenda, pero creo que es necesario que lo sepa, estoy enamorada de Cristiano. - soltó Martina sin rodeos, observando atentamente la reacción de Sandra.
Sandra frunció el ceño, tratando de procesar lo que acababa de escuchar, no era cercana a Javier y, aunque sabía poco de su vida personal, nunca imaginó que estuviera involucrado con alguien.
- ¿Y por qué me cuentas esto? - preguntó Sandra, tratando de mantener la compostura.
- Porque ambos sabemos que este "romance" no es adecuado para ninguno de ellos, Javier es un omega joven, necesita estabilidad y protección, no una relación que lo desvíe de su camino y Cristiano... bueno, él merece a alguien que lo entienda y lo apoye de verdad, alguien como yo. - Martina habló con una seguridad que dejaba en claro sus intenciones.
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Corazón Sin Vida | Cristiano Ronaldo × Chicharito
Hayran KurguJavier Hernández un joven que desde hace 12 años ha vivido encerrado, triste y solitario, mientras que Cristiano vive en Portugal cargando con melancolía y recuerdos de un antiguo amor.