15. Ramyeon pt.2

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Parte 15._ Ramyeon pt.2.
Fideos instantáneos coreanos.

Fideos instantáneos coreanos

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JJK.

A veces es mejor tomar el camino largo, sobre todo cuando no tienes interés de llegar a tu destino. Jungkook iba rumbo a la tienda de suplementos en la que trabajaba, cumpliendo con la misma rutina de lunes a sábados. Lo que en un primer lugar parecía un viaje improvisado por la audacia de sus pasos, poco a poco se volvió un respiro para su mente agobiada.

Su piel se refrescaba con la humedad proveniente del río Han, mientras que el sonido del tráfico ligero le producía una sensación de calma. El ambiente era diferente al que acostumbraba, con cierta vibra familiar. En parte, gracias a los edificios de departamentos y los locales comerciales que se acentuaban al otro lado de la carretera.

Jungkook respiró hondo, sintiendo un abismo de alivio después de un tiempo complicado. Sin embargo, este sentimiento solo duró unos segundos, ya que al voltear la mirada, se encontró con un rostro conocido, pero de un sujeto que no conocía tan bien. Namjoon caminaba en sentido contrario al de él, con la mirada clavada al frente y los hombros elevados, sumamente tenso. 

Atónito, Jungkook dio un vistazo a su alrededor, y fue entonces cuando distinguió a lo lejos el edificio al que Jimin lo había llevado en aquella noche de mal clima. No había podido reconocerlo antes porque esta vez faltaban los detalles que lo habían hecho inolvidable: la imagen de la luna, el velo de la lluvia y la compañía de quien ahora se sentía lejano.

Una punzada se retorció en su pecho. El dolor y la duda hicieron estragos en él. Pero fue un fugaz pensamiento quien dictó sus acciones: tenía que hablar con Namjoon.

Decidido, Jungkook cruzó la calle sin mirar, siguiendo a Namjoon a la tienda de conveniencia. Después de disculparse con el conductor que casi lo arrolla, se dirigió a la entrada del negocio, donde el sonido de una campanilla anunció su llegada. Sus ojos grandes y redondos se toparon con la mirada cansada y confundida del dependiente, y de manera cortés, Jungkook le brindó un saludo antes de seguir adelante, con la vergüenza a flor de piel. 

Su agitación y búsqueda insaciable llamaron la atención de los presentes, incluyendo a una mujer y su hijo en la zona de lácteos, un trío de niños husmeando en las revistas y una adolescente comiendo fideos mientras leía una historieta. Pero la persona que Jungkook buscaba se escabulle sigilosamente a través de los pasillos, como si tratara de evitarlo.

Jungkook finalmente alcanzó a Namjoon en la sección de alimentos instantáneos, donde Namjoon estaba examinando los paquetes de ramen en la estantería.

—Namjoon —llamó, Jungkook, con urgencia y nerviosismo.

Namjoon se volteó y levantó una ceja, claramente sorprendido de ver a Jungkook allí. Pero fue Jungkook quien se tambaleó sobre sus pies, su mirada fija en los colores morados, azules y amarillos sobre la mandíbula de Namjoon. 

Charlas de sobremesa; NamminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora