바래요 (hopeful) - bangchan (stray kids) (+18)

capítulo 28: vacío (+18)

"Ella era una persona que no conocía de todas formas, ella pudo simplemente pasarme de largo, pero ¿por qué? Cerré mis ojos por el amor, mi corazón se cerró por eso. Me hiciste así." (죽어버릴지도 몰라 (Might Just Die) – HISTORY)

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Me sentía vacío.

Miré el ticket de avión aún en mi mano, pensando. Pensando demasiado. Pensando en que no sabía cómo enfrentar a mamá y papá. Pensando en cómo todo en la empresa era un caos ahora mismo. Pensando en cómo los chicos tenían que promocionar el álbum especial sin mí. Pensando en Brooklyn, que tenía tres días sin dormir, y el rostro hinchado por tanto llorar. Pensando en cómo ella no había querido comer nada, y preguntándome si era por las STAY que hicieron comentarios sobre su peso y su apariencia en redes sociales, cuando la encontré leyendo todo en su móvil al entrar en su oficina en la empresa.

Pensando en cómo nos descubrieron. Pensando si habrán llamado a la empresa antes para ofrecerles su silencio a cambio de dinero, cómo habían hecho antes, y la empresa nos lo ocultó. Pensando en todos los comentarios y videos que vi en línea, en todas las fotos de nosotros compartidas en el internet, en todas las fans que me estaban haciendo de lado por amar a Brooklyn. Como si amar estuviese mal. Como si amar tuviese que ser tan sufrido, un pecado, un error.

Levanté la mirada a Brooklyn, el avión en silencio, las turbinas ahogando el sonido del piloto anunciando que estábamos a treinta minutos de llegar a Sydney. Sus pómulos sobresalían un poco más que antes, ahora que ganó peso, las fans la hicieron sentir mal por intentar disfrutar más de comidas que ahora podía permitirse por no tener que ahorrar cada centavo; así que comenzó a evitar comer demás. La vi usar maquillaje más pesado que antes, noté que era el mismo maquillaje para las cámaras que usaba en mí, quizás para estar presentable ante las fans que nos siguieron por el aeropuerto en Incheon.

Vi como toda la presión se la estaba comiendo viva, y era mi culpa. Totalmente mi maldita culpa. Por ser un cabrón descuidado, por sentirme tan seguro de que estaríamos bien. De que nadie nos notaría. De olvidar que soy el maldito Bangchan de Stray Kids, y que el mundo tiene ojos en mí las veinticuatro horas del día, y que no podría relajarme. Nunca.

Al bajar del avión, estábamos solos. Solos contra el mar de fans de Australia que nos esperaban, y supe que las sasaengs hicieron algún comunicado en línea informándoles a todas que íbamos a Australia por dos semanas, por órdenes de la empresa. Querían enviarnos lejos para "calmar las aguas", según ellos. Lo hacían para castigarnos, lo sabía muy bien, por que hicieron lo mismo con Hyunjin durante su escándalo hacía tiempo. Aíslarlo para joderlo de la cabeza y volverlo más dócil a las órdenes de la empresa.

Tomé la mano de Brooke en la mía, el corazón me latía fuertemente en el pecho.

—Haremos esto juntos, ¿sí?—le dije en inglés. Ella asintió con la cabeza, pero no me miraba a la cara. El cabello rubio platinado le caía en el rostro, pero la vi respirar pesadamente mirando a nuestros pies.

—Sí.

—Te amo, ¿lo sabes?—le recordé, aguantándome yo mismo las ganas de llorar. Tenía que ser fuerte por los dos. Ella me necesitaba en este momento, tenía que ser un hombre fuerte ahora mismo por ambos—Te amo tanto, Brooke.

Entonces me miró. Sus ojos brillaban, pero se veía tan cansada. Me odié a mí mismo por no ser más cuidadoso con nosotros. Con nuestra relación.

—Quiero que tus fans confíen en mí—la gente pasaba a nuestro alrededor, nos daban miradas raras al estar parados al lado del pasillo de los baños del aeropuerto, pero no me importó—. Quiero que... me acepten.