Testimonio de la hermana Bety.

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Mi nombre Beatriz González,Soy de Colombia.

Muchas veces pensamos que seguir a Jesús es una pérdida de tiempo y más si eres un/a joven,tengo 16 años y decidí entregar mi vida al señor solía vivir en una oscuridad que no encontraba alguna salida pero Jesús fijó sus ojos en mi y con su gran amor me arrebató de la oscuridad que me encontraba y me hizo luz,solía tener depresión, ansiedad, pensamientos de muerte,temores,rencor,heridas que se encontraban muy abiertas aún siendo joven me encontraba atribulada pero un día fui a la iglesia y mi vida cambió fui cansada,agotada de mi vida y quería algo diferente en mi vida y el señor me ha dado paz en medio de las tormentas,me ha dado de su amor,gozo,esperanzas y ahora se convirtió en mi refugio y mi hogar
Dios siempre nos espera con los brazos abiertos y cuando llegas a sus brazos y te invaden su amor y paz te das cuesta que era lo único que realmente necesitas en la vida,cuando nos acercamos a Dios,El tambien se acercará,lo que Dios más ama es a ti y a mi

Entregarle nuestra vida a Dios siendo jóvenes no es un perdida de tiempo sino un hermoso privilegio.

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