Estaba fascinada con cada lugar que veía, algo que me impresionó fue ver a la distancia el mar. Mi parcela, como las demás amarillas y azules, están en el interior de la nación Iris por lo que jamás tendríamos acceso al mar, en las periferias rodeándonos, se encuentran las verdes que nos protegen de los salvajes. Pocas veces vi un mapa, pero se asemejaba a un pan enrollado de diferentes gustos. En la antigüedad era un continente con muchas naciones divididas llamado Europa.No sabía el significado del nombre "Parcela blanca", pero había varios motivos y analicé cada uno de ellos, uno: porque aquí vivían los Reales y la realeza, dos: porque esta parcela es la base y madre de todos los laboratorios, de aquí salen las vacunas para toda la nación y por ende eso los hace tan poderosos, tres: por considerarse mejor que el resto, diferentes, egocentrismo y vanidad, cuatro: porque realmente predominaba el color blanco, a dónde mires, edificio, decoración, todo era blanco e impoluto. Quizá no había que elegir una sola opción, quizá eran todas y cada una de ellas, pero amaba pensar y entretenerme.
Las estructuras se veían viejas pero muy sofisticadas y elegantes, tan impresionantes a la vista que quedaban hipnotizadas viéndolas. Era hermoso, así también como la mayoría de los Reales que nos encontramos en el camino. El color azul zafiro de sus ojos era bellísimo, eran tan antiguos como los Nativos, descendientes de los que sobrevivieron a la gran guerra. Los reales eran una especie, pero la realeza era la monarquía que dominaba a todo Iris. Ellos estaban ubicados en el centro, para un salvaje era imposible llegar hasta ellos.
Nos hospedamos en un edificio donde había mucha gente diferente, no sólo de color de ojos, también de diferentes etnias, nativos, reales, Anion, y yo, que no podía pasar desapercibida por ningún lugar. Taien usaba uniforme e íbamos a acompañados de un pelotón que él comandaba, además de los cargos superiores. Muchos más iban a tener su ascenso, pero yo sentía que mi hermano tenía una mira en la espalda, y yo ayudaba a qué fijen el blanco.
Nuestra habitación tenía dos cuartos que se unían en una sala de estar. Nunca dejaba de ser impresionante el lujo en el que vivían, las comodidades y la abundancia. No me molestaba para nada, pero sí notaba que por algo estaban tan preocupados en mantener el orden y la paz, ¿quién querría perder todo lo que tenían?
—Helen, ¿dónde estás? —llamó Taien buscándome en la sala.
—Aquí estoy —anuncié, estaba escondida detrás de la cortina de la ventana, veía a miles de personas que pasaban por las puertas del hotel—, tienes miedo de perderme —bromeé cuando salí de mi escondite.
Taien suspiró y simuló sonreír, lo notaba preocupado y estresado. Vestía un traje negro, era nuevo, el de capitán, completamente negro con detalles blancos y dorados, y las medallas correspondientes. Estaba muy guapo, demasiado.
—Miedo de que quieras huir —respondió, miraba un papel que tenía en sus manos y luego me miró a mí—, porque crees que eres mi prisionera —y su tono de voz fue rasposo. Estaba hablando en serio, y aunque fingimos que nada había pasado luego de la noche de la fogata, a él sí le molestó lo que dije.
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ANION #1
Romance"No era difícil, solo necesitaba memorizar: 1-Los salvajes tenían ojos color púrpura. 2-Los nativos tenían ojos color amarillo. 3-Los Anion color verde. 4-La realeza color azul. Y por último... Mi duda era a qué grupo pertenecía yo con ojos colo...