˗ˏˋ 26 MilkLoveˎˊ˗

Capítulo 17

Milk se despertó con un extraño zumbido mecánico. Como un vaporizador o algo así. Mezclándose con el débil sonido del zydeco y risas. Coches pasando por la calle.

El bar de al lado lleno de gente y música metal...

—¡No te muevas!

Parpadeando hasta abrir los ojos, se encontró a Love sentada en el suelo a su lado, acariciándole el hocico. Pero la parte más impactante era el hecho de que su cabeza de dragón estaba acunada en su regazo.

Y sus pechos estaban presionados contra su mejilla. Um, síp...

No tenía ningunas ganas de salir de esta posición. Sobre todo porque le sostenía la cabeza en un ángulo que le permitía ver su escote, y el hecho de que no tenía sujetador. Algo que le hacía la boca agua y que su corazón se acelerara.

A pesar del dolor, se puso caliente como el sol. Afortunadamente, estaba acostada sobre su estómago por lo que era el único que notaba esta situación incómoda. Además del suelo debajo, que probablemente no estaba más feliz al respecto que ella.

—¿Estoy muerta?

Love frunció el ceño.

—¿Por qué preguntas eso?

—Esto no se siente real. Mi habitación... tú. —Muerta o dormida parecían las dos conclusiones más lógicas, y si era un sueño, le gustaría pensar que ya estaría desnuda con ella.

—Es real. Como lo es la puñalada accidental que te clavé cuando estábamos atrapados.

Maldita sea, eso no había sido un sueño. No era de extrañar que su costado doliera tanto. Por lo menos ahora sabía que su memoria estaba íntegra.

—¿Estás segura de que fue un accidente?

—Ah, ¿ahora quién es la mala?

—Todavía tú.

Love resopló.

—Sí, bueno, esa es mi historia y la mantengo.

Si no sufriera tanto, podría haberse sumado a su risa, pero aún no estaba convencida de que no lo había hecho intencionalmente.

¿Está despierta?

Milk se enderezó al oír la voz de Aou en su cabeza. Antes de que pudiera moverse, su hermano se acercó interponiéndose en su campo de visión. Junto a Boss, quien se arrodilló al lado de Love.

Síp, volvió a temer que estaba muerta, sobre todo porque Boss estaba aquí mirándola. El infierno debía haberse congelado y sucedido otras catástrofes para que esto ocurriera.

Boss tomó su oreja y fríamente dejó que el fracaso regresara a sus ojos.

—Recibiste una herida desagradable y una caída. Si no fuera por tu sworn, no habrías sobrevivido.

Love se encogió visiblemente.

—Si no fuera por mí, no habría estado herida.

—Bueno... —Boss arrugó la nariz—. Algunas veces se gana. Otras se pierde. Además, todos hemos querido apuñalarla en alguna ocasión. Tienes la suerte de haber sido la primera.

Milk se echó a reír, y luego gimió. Ese era su querido hermano, el imbécil.

Ignorando a Boss, se volvió a mirar a Love.

—Así que, ¿qué pasó? ¿Cómo salimos de allí?

—Ellos respondieron a tu Bane-Cry. Sólo tardaron un poco más de lo que querían en romper los escudos que nos les dejaban entrar para ayudarnos.