14. Apreciando cada momento

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(contiene una escena de sexo heterosexual, se recomienda discreción)

Estoy agotada, me falta demasiado aire, mire a la mujer que se movía frente a mi tan enérgica y emocionada, me hacía sentir mal por mi falta de disposición. Me deje caer al suelo intentando recobrar el aliento

- vamos Marina, sigue con los ejercicios - levanté mi mano en señal de rendición pero ella reía burlona ante mi silenciosa suplica - recuerden siempre ondear su vientre, no es solo mover la cadera de un lado al otro - voltee a ver a Emilia mientras apoyaba mis manos en el suelo, en definitiva lo hacía mejor que yo

Antes de todas estas clases, yo realmente creía que era buena bailando, pero algo más similar al folklore y la bachata que a la danza árabe, no se podían comparar. El jefe nos había puesto varias instructoras de distintos tipos de danza para prepararnos para la abertura del streeptease, no comprendo para que, siento que los hombres solo irían a ver cuánto se mueven las tetas al bailar y eso con facilidad se lograria con un tubo de pole dance. Aún que aún no llego a esa clase

- deben trabajar mejor en su sensualidad, saquen de su interior aquella gatita que necesita ser mimada - fruncí el ceño ante sus comparativas. No deseo ser mimada por nadie más que Catalina

- señorita, creo que necesitamos un descanso - asentí desesperada ante las palabras de Jenny que parecia haber sucumbido al cansancio igual que yo. Las veteranas no demostraban agotamiento en comparación

- igual la clase ya terminó, descansen y en sus ratos libres intenten practicar con su vientre - señaló su estómago, moviendolo hacia adentro cual oleaje, no puedo negar que es un poco atractivo de ver

Solté un suspiro gutural, acostandome en el frío piso, Emilia y Jenny me miraron desde arriba riendo mientras se secaban el sudor con una toalla de manos cada una. Jenny me tendió la mano que tome con pesar para poder levantarme

- con tu figura, no esperaba que tuvieras tan poca resistencia - agradecí con la cabeza cuando me entrego una toalla también

- sabes bien que desde la escuela no hago deportes Jenny y eso solo por qué eran obligatorios - la risa de Emilia inundó la habitación, al mirarla con atención ya se encontraba tomando la mano de su novia, acariciando con cariño su dorso - ay, mi mamas estan enamoradas - Jenny me golpeó el brazo, roja cual tomate por mis palabras - ¡Violencia intrafamiliar!

- no seas ridícula, maldición - una sonrisa asomó sus labios que fue besada casi al instante por Emilia. Mi corazón cosquilleaba feliz por ellas - te amo... - una breve imagen de Catalina cruzo mi mente haciendo que mi rostro se calentará. Aún es pronto, no te apresures

.....

Cerré mi ojos ante la punzada que atravesó mi espalda, suspiré intentando calmar el dolor, apreté mis ojos con fuerza cuando su mano tiró de mi cabello, obligandome a chocar mi espalda en su pecho. Sus jadeos y gruñidos eran desagradables, como un Pug que acaba de correr una larga distancia. Gemi con falsedad, intentando aferrarme a la cabeza calva de aquel hombre, mi mano resbalaba por su sudor

- eres deliciosa - paso su lengua por mi cuello, creando un escalofrío en mi. Cerré mis ojos intentando pensar en algo más agradable, pero las embestidas no me dejaban hacerlo

- mmm...más por favor - solo termina pronto. Saco su miembro de mi solo para girarme con brusquedad, era más molesto tenerlos de frente, debía ser más convincente. No niego que era atractivo, musculoso y sin ningún pelo en pecho, sus tatuajes atraían la mirada a su torso marcado, le gustaba la atenció. Pase mis manos por su pectoral cuando se acostó sobre mi, acomodando nuevamente su miembro en mi interior - aaaahhh...

Trabajadora de la noche Donde viven las historias. Descúbrelo ahora