Incomplete [AppleRadio]

Capítulo 21.

- No permitiré que la memoria de Alastor quede tan empañada.

Husk soltó un gruñido antes de tomar un largo sorbo de su botella de cerveza barata. El olor a tabaco y sudor inundaba el aire, y la música se sentía tan lejana que ni siquiera se había dado cuenta en qué momento los músicos decidieron cambiar la canción por otra más horrenda para sus canales autistas. Aunque de todos modos no es como si estuviera prestando atención a la melodía.

A su lado, Niffty permanecía con el ceño fruncido y una mirada sombría en su dirección.

En cuatro meses se cumpliría un año de la muerte de Alastor, y las cosas dentro de la comunidad seguían igual que el primer día que decidieron darle el título de "secuestrador y asesino de niños" y ni siquiera respetaron el hecho de que ya se encontraba a cuatro metros bajo tierra. Tras la autopsia y la realización de los trámites legales, los Eloi se hicieron cargo de pagar los preparativos correspondientes para que el omega tuviera al menos una tumba. Sin embargo, los demás se negaron a permitir que el cuerpo de un "asqueroso asesino" fuera enterrado en el mismo campo sagrado donde enterraron a sus seres queridos, lo que significó más problemas y peleas en las que no obtuvieron ninguna victoria.

Al final, Alastor tuvo que ser enterrado en el mismo lugar donde había dado su último suspiro de vida y ese hecho provocó que la señora Eloi rompiera a llorar. Al principio, Husk y Niffty pensaron que su despliegue de emociones estaba dirigido al asunto legal que terminó en la nada en sí mismo, pero en realidad fue mucho más allá de eso.

Fue entonces cuando se enteraron de cosas mucho peores.

Como que Alastor había sido abusado sexualmente en el bosque y que su cuerpo magullado fue encontrado en el camino al día siguiente por el doctor del pueblo vecino quien hizo lo posible por ayudarlo. También les dijeron que después de ese suceso se habían generado muchos rumores sobre que el omega era estéril. Rumores que comenzaron y se extendieron, aumentaron e incluso se confirmaron gracias a la esposa del doctor, lo que desencadenó las burlas y murmullos en contra de Alastor, que fueron haciéndose más fuertes con el paso de los días hasta llegar a un punto en el que nadie volvió a saber de él.

Todos asumieron que se había encerrado en su casa. Avergonzado, humillado, aterrorizado, asfixiado y sumido en una profunda tristeza por su condición. Pero todos los rumores se desvanecieron cuando los vecinos dijeron haber escuchado risas infantiles provenientes de su casa. Por supuesto, para entonces ya había comenzado el secuestro de la menor, por lo que llamaron a las autoridades correspondientes para asegurarse de que no había nada sospechoso -y más teniendo en cuenta que era imposible que ese omega tuviera contacto con niños- pero terminaron llevándose una sorpresa cuando vieron a Alastor con una pequeña niña y un hombre que decía ser su esposo.