Stupid Love Story [Stray Kids]

XXIII. TONIGHT

Félix suspiró internamente mientras veía a Jisung, que claramente estaba luchando por entender la explicación. Aunque su amigo era brillante en muchas cosas, la escuela no parecía ser una de ellas. Félix, por otro lado, siempre había destacado en sus estudios y era evidente que tendría que llevar la mayor parte de la carga en este trabajo en grupo.

A medida que Félix explicaba las ecuaciones y las pendientes, se dio cuenta de que, aunque Jisung no comprendiera completamente los conceptos, al menos estaba intentando seguir. Félix se detuvo cada pocos minutos para asegurarse de que su amigo no se quedara demasiado atrás, sabiendo que la paciencia era clave.

Finalmente, después de lo que parecieron horas, lograron terminar la tarea de matemáticas. Jisung se dejó caer en el sofá, claramente agotado por el esfuerzo mental.

—Eso fue... intenso —dijo Jisung, frotándose las sienes—. ¿Cómo puedes hacer esto todos los días?

—Solo es cuestión de práctica —respondió Félix con una pequeña sonrisa—. Además, no es tan difícil una vez que le agarras el truco.

—Bueno, creo que nunca le agarraré el truco —respondió Jisung con una risa—. Pero gracias por la ayuda, Lix. No sé qué haría sin ti.

—No hay problema, Ji. Para eso están los amigos —respondió Félix, aunque su mente ya estaba enfocada en lo que vendría después. Sabía que el verdadero motivo de su visita aún estaba por desarrollarse, y necesitaba esperar el momento adecuado para llevar a cabo su plan.

Pero por ahora, la tranquilidad del estudio y la compañía de su amigo eran suficientes para mantener a raya sus pensamientos más oscuros. Se recostó en el sofá al lado de Jisung, observando cómo su amigo comenzaba a divagar sobre alguna serie de televisión que había estado viendo recientemente. Félix sonrió y asintió, aunque apenas prestaba atención a las palabras de Jisung, su mente ya estaba planeando los próximos pasos.

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Apenas habían terminado la tarea de matemáticas. Por primera vez en su vida, Félix se sintió agotado, ya que con HyunJin, normalmente no recibía tantas preguntas. Era evidente que a su amigo le costaba entender las cosas, y Félix realmente necesitaba un descanso. Por suerte, era la hora del almuerzo, y algo le decía que disfrutaría de una deliciosa comida.

Escuchó que alguien llamaba a la puerta, sacándolo de sus pensamientos.

—Jisung, me dijeron que hoy teníamos un invitado —reconoció la voz al instante, y su corazón se llenó de alegría.

—¡Abuelo! —gritó Jisung emocionado, saltando de la silla para abrazar al hombre.

—Qué sorpresa verte estudiando —comentó el hombre, divertido, mientras respondía al abrazo con gusto.

—Es un gusto verlo de nuevo, Sr. Robert —saludó Félix, poniéndose de pie para ofrecer una leve inclinación al hombre.

—Si nuestro visitante no es otro que el más pequeño de mis nietos adoptivos. Me encanta verte, Félix —dijo el hombre, dejando a su nieto para acercarse y abrazar al menor, tomándolo desprevenido.

—Gracias, Sr. Robert, a mí también me encanta verlo —respondió Félix, apenas correspondiendo al abrazo.

—Me voy a poner celoso si siguen abrazándose así —replicó Jisung, haciendo un puchero.

—Sabes que eres mi nieto preferido, Jisung —respondió el hombre, terminando el abrazo.

—Soy el único que ves; los demás viven en el extranjero —protestó el chico, haciendo un berrinche.