Sofía dormía plácidamente en el pequeño piso de tierra, con un brazo colocado alrededor de la cintura de Emma. Después de unos momentos de silencio, Emma cuidadosamente se levantó y dejó su sitio. Sofía se movió un poco y soltó un pequeño suspiro, pero continúo durmiendo, inconsciente del movimiento de su novia.
Emma se levantó temprano por la mañana y se sentó en el pequeño suelo, apoyada contra la pared. Después de unos momentos, abrió una pequeña bolsa de cuero y sacó varios libros gruesos, abriendo dos y colocándolos en el regazo.
Durante las horas siguientes, mientras Sofía dormía, Emma pasaba las delgadas páginas de los libros y leía información y hechizos mágicos.
Pasado un rato de silencio y lectura, Sofía se movió un poco y abrió los ojos con pesadez, frotándose la cara con una mano y soltando un pequeño suspiro. Después de unos momentos, se incorporó ligeramente y buscó a su alrededor a Emma con la vista.
-¿Estás despierta ,Sofía?
Sofía se incorporó ligeramente, frotándose con una mano la cara y los ojos y soltando un pequeño suspiro. Después de algunos momentos, siguió la vista hacia el pequeño sonido de la voz de Emma.
-Si, si. Estoy despierta- respondió con la voz algo ronca y cansada.
-Levanta. Vamos a buscar a alguien que sepa romper maldiciones de amuleto.
Sofía soltó un pequeño suspiro y se volvió hacia Emma con gesto cansado, levantándose con pesadez y expresión pensativa, colocando una mano en la nuca y dándose un pequeño masaje. Después de unos momentos, intentó enfocar la vista y habló con tono cansado.
-Muy bien, vale...vamos a buscar a alguien...
-¿Conoces a alguien que sepa?
Sofía siguió con la vista hacia Emma para unos momentos y se apoyó contra la pared con gesto pensativo, intentando recordar a alguien. Después de unos momentos de silencio y pensamiento, finalmente habló con voz vacilante.
-Si...si, creo que conozco a alguien. Un hombre que vive cerca de aquí.
-¿Quién querria vivir cerca de esta mugrosa cueva?-bromeó Emma.
Sofía siguió con la vista hacia ella y dejó escapar un pequeño suspiro ante el comentario de Emma. Después de un momento de silencio, habló con el ligero toque de una sonrisa.
-No me refería a esta cueva en concreto, idiota...me refería a por aquí en general. Él vive en una pequeña cabaña no lejos de aquí.
Después de unos momentos de silencio, Sofía se incorporó del pequeño trozo de suelo y se preparó para partir. Después de algunos momentos, habló con una voz tranquila.
-Vamos, es por aquí. Hay que darse prisa si queremos localizarle.
Sofía salió de la pequeña cueva, seguida de cerca por Emma. Después de un pequeño paseo y varias quejas de Emma por caminar, llegaron a una pequeña cabaña cercana, aparentemente abandonada. Sofía se volvió hacia Emma y habló con tono tranquilo.
-Creo que es aquí.
-Vale...si lo dices tú.
La ojiazul soltó un pequeño suspiro y siguió con la vista hacia la pequeña cabaña, antes de acercarse un paso hacia adelante y llamar ligeramente a la puerta. Después de unos momentos de silencio, se volvió de nuevo hacia Emma con gesto serio.
-Creo que hay alguien dentro.
-¿Estás segura de que nos ayudará?
Sofía siguió con la vista hacia la pequeña cabaña y se volvió brevemente hacia Emma, antes de responder con tono ligeramente vacilante.
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El Amuleto
RandomUn día Emma,una chica de 17 años ,entró a una casa abandonada y conoció a una pelinegra,ojiazul,con la que tendrá muchas aventuras...