24| Puñetazo

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Olivia

Todavía no sé si es buena idea o no ir a la fiesta en el local ese. La verdad es que después de haber perdido el partido esta mañana, ver como Praxton Hall ganó la competición y el cómo me habló ayer Liam, no tengo muchas ganas de salir.

Lo que más vueltas me da en la cabeza es una persona, Liam. Llevo desde anoche sin hablar con él y no puedo evitar sentirme mal por ello, el intento justificarse y pedirme disculpas pero no le deje hablar, como consecuencia él se mantuvo alejado de mí todo el día, estoy segura que sentí su mirada mientras hacíamos el inicio del partido.

Los recuerdos de la conversación me pasan por la cabeza sin poder evitarlo, me revuelvo en mi cama tapándome los ojos con las palmas de las manos pero es inútil. Siento un nudo en la garganta y los ojos humedecerse a medida que me doy cuenta que si no me hubiera acercado a Luke después del entrenamiento Liam no me habría dicho nada.

Pero de todas formas no entiendo porque me hablo de esa manera y todo porque me vio con Luke y le dije que me ayudo a practicar, me debería de haber quedado callada.

Si no hubiese sido por Luke hoy seguramente no me hubiera salido el dichoso paso en el ensayo de antes del partido, o justo al empezar este. Y esto parece que no lo entiende, o no lo quiere entender.

Estoy tumbada en mi cama, con el teléfono en la mano, mirando las historias de los compañeros de equipo de Liam. Todos parecen estar pasándoselo bien, a pesar de haber perdido. Supongo que para ellos quedar en segundo lugar sigue siendo un logro importante, especialmente porque muchos están buscando becas deportivas para entrar en universidades el próximo año. Verlos tan despreocupados me hace sentir aún más perdida y preguntarme si los chicos —Carlos, Christian y Liam— están igual.

Y luego esta el tema de la universidad, mientras Liam quiere estudiar en Oxford, yo no se que quiero. Por una parte quiero ir a la Universidad en Italia, a la misma a la que fueron mi madre y Cristina; pero por otra parte quiero quedarme y no dejar a Liam aquí, después de tantos años interesada en él, cuando lo consigo me voy.

No hemos hablado de esto Liam y yo, creo que piensa que me voy a quedar también. ¿Pero es lo que quiero? En cierta forma el estudiar en Italia creo que me acercaba más a mi madre, y hacer lo que no llegó a poder Lara.

Mientras mi mente divaga sobre la universidad, sin querer entro en el chat de Luna y leo el mensaje que me dejó ayer por la tarde.

Ir a una fiesta sola con una chica que no conozco apenas, ¿es buena idea?...La verdad es que no se mucho de Luna, se que va al instituto British Hall y que tiene 18 años, aunque esto último es algo que supongo ya que en su usuario de Instagram tiene dicho número.

Finalmente tecleo sin pararme a meditarlo;

Yo: Iré al local, ¿a qué hora quedamos?

Miro por un par de segundos el mensaje, no estoy segura de querer ir, y mas sabiendo que estará Luke pero vida solo hay una ¿no? le doy al botón de enviar.

No pasa ni un minuto y veo que Luna ha visto ya el mensaje y esta escribiendo.

@Luniii18: Podemos quedar a las 20:30 en la puerta del hotel y de allí vamos andando.

Supongo que ya no hay vuelta atrás, iré a la fiesta.

...

El bullicio de la fiesta se escucha unas calles más abajo del local, y a medida que nos acercamos la música se hace más nítida, sin quererlo mi corazón se empieza a acelerar. Luna me sujeta la mano con firmeza en cuanto pasamos al lado de un grupo de chicos que tienen pinta de ser del Praxton, estar de la mano con Luna se siente reconfortante.

Aquella noche inolvidable Donde viven las historias. Descúbrelo ahora