Un plan en marcha.

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-¿Todo se encuentra bien?- Preguntó con una voz delicada.

-Yo...yo no lo sé.- Dijo sin saber que responder. -Algo me está ocurriendo, y no sé exactamente qué es y por qué me ocurre. Y eso me genera inseguridad.

-No hay necesidad de alarmarse.- Habló serena para tranquilizarla. -Estoy aquí para ayudarte. Así que cuéntame todo lo que te pasa...

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Una rápida e indomable brisa movía con vigor grandes nubes en el infinito y azul cielo, mientras que el gran astro de la luz iluminaba sus amplios y bellos dominios de abundante vida junto a las obras de esta misma, en especial sobre una choza aledaña al caótico Reino Champiñón.

Ha pasado un día desde que nuestro fontanero de rojo tuvo aquella conversación con Tari. Una conversación algo dura y complicada para el fontanero por el hecho de haber tenido que confesar varias cosas como su cambio, su camino hasta ese momento, y por supuesto; admitir ante ella sus sentimientos hacia su mejor amiga. Concluyendo en que la cyborg lo ayudaría con mucho gusto.

Pero a pesar de que el día anterior no lograron hacer algo debido a un contratiempo. En esta ocasión si encontraron la oportunidad para comenzar a planear el más grande y complicado plan al que Mario ha estado involucrado; pedirle una cita a su mejor amiga, Meggy.

En el comedor de la casa de los hermanos Mario. Nuestro fontanero de rojo estaría sentado en una de las sillas del comedor mientras sostenía su cabeza con ambas manos mientras que Luigi estaba delante suyo, teniendo una de sus manos en su mentón, pensando. Y Tari estaba justo alado de del rojo mientras acariciaba con mucha felicidad la cabeza de Lez.

El trio de amigos han estado sentados por algunas horas mientras escuchaban, pensaban y planeaban algo para conseguir que Mario tuviera una cita con la peli-naranja. No obstante, durante el largo rato que habían estado sentados pensando y analizando las posibles situaciones, la gran mayoría llegaban a nada.

El poco progreso que se estaba teniendo no era para nada favorable. Y eso comenzaba a molestar a Mario quien no pudo resistir por mucho más.

-¡Es suficiente! Ya no puedo seguir así.- Gritó, llamando la atención del dúo. -No vamos a conseguir nada de esta manera. Repasemos una vez más lo que tenemos.

-¿Otra vez, Mario?- Preguntó el de verde al respecto. -Ya es la sexta vez que lo hacemos.

-No importa. Hagámoslo una vez más.

-Mario, estas un poco irritado. Solo relájate y respira- Dijo la chica acercándose al de rojo para tomarlo del brazo a lo que este último comenzó a respirar y a relajarse.

-Ugh. Lo siento, pero es que la verdad es que hemos estado aquí por mucho tiempo y no hemos tenido gran progreso.- Dijo el de rojo disculpándose.

-Esta bien, Mario. Además, nos ayuda para recapitular.- Pronunció Luigi al respecto mientras tomaba unas notas. -Bueno. Lo que tenemos para la propuesta es: Ir bien vestidos, con un traje elegante de preferencia. Llevarle un regalo; aún no decidimos si un ramo de flores o un arma-

Estoy harto de estoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora