Amor in-reciproco

Capitulo 32: Entre contrastes y tiempos

-Sed bienvenida a mi humilde castillo ¡Oh! emperatriz de otra época - La castaña sobre el trono dijo con una sonrisa que mostraba sus dientes - Has recorrido un largo camino para llegar hasta aquí y ¿Para qué? este podría ser el final del camino.

Luz sacudió la cabeza para negar las palabras de su otro yo - No puedo decírtelo, eso arruinaría todo el crecimiento por el vas ooo mejor dicho... ibas a pasar - Musito tras hacer una pausa, todos menos ella alzó una ceja, pero la primera en hablar fue la emperatriz.

- ¿Iba a pasar? Estas loca Noceda - Recalco la emperatriz riendo - Pero yo soy tú y tu eres yo y eso significa que yo también lo estaré en el futuro - sus ojos se posaron sobre Hunter al verlo poner una mano sobre el hombre de Luz - Es por el ¿Verdad? - Le cuestiono a ella.

Luz solo guardo silencio por unos segundos antes de negar y responder - No puedes saberlo, no puedo arriesgar nuestro futuro - Respondió sin dar mucha información nuevamente.

Ambas castañas se miraron por un momento, cruzando sus miradas para tratar de adivinar algo sobre la otra. La emperatriz sonrió de nuevo, no recordaba la última vez que alguien la entretuvo como ahora, ni siquiera el ilusionista más grande de las islas podía mantener su atención por tanto tiempo y mira que realmente bueno en su trabajo.

- Al menos dime... ¿Qué me paso para convertirme en ti? Estas frente a mí y no puedo reconocerme a mí misma en ti. Tienes mi cara, mi voz, mi magia, pero aun con eso eres una bruja diferente... no te reconozco - Repitió la emperatriz esa palabra.

- Te enamoraste de alguien y eso nos cambió - Luz rio algo avergonzada tras responderle a la emperatriz, ella sentía de esta charla como algo catártico donde enfrentaba a su yo pasado.

- Que tonto suena eso - Murmuro la emperatriz - Nosotros no podemos enamorarnos, eso nos hace vulnerables, convierte a esa persona en nuestra debilidad - Señalo con un largo suspiro antes de seguir hablando.

- ¡¿Por qué haríamos eso?! nos exponemos al peligro por el solo hecho de buscar pareja, le estamos abriendo la puerta al traidor con este acto. - Exclamo la emperatriz, viendo a la castaña bajar la mirada algo decepcionada.

- Lo sé, pero que podía hacer, ella era perfecta y yo estaba flechada con su figura - Luz respondió entre suspiros nostálgicos con un leve tono de tristeza - Fue un error, uno que me llevo a estar aquí y...

- La perdiste ¿Verdad? - La emperatriz le interrumpió, suspirando y sacudiendo la cabeza hacia los lados, podía entender a lo que se refería la castaña - Pero que hay de el - la cuestiono, notando como ella se hundía un poco en sus hombros. - Una víctima de nuestras indiscreciones al parecer - Ella suspiro de nuevo, decepcionada de sí misma y de lo que acabaría convirtiéndose en el futuro.

Luz aun con la cabeza gacha escucho a la emperatriz acercarse hasta ella, quedando frente a frente la una de la otra. Una mirada de sorpresa ilumino el rostro de su versión más joven, las diferencias eran más notables de cerca.

Las canas, la altura entre ambas que era tal que Luz debía arrodillarse para estar a la altura de la emperatriz, la forma en que ambas sonreían era distinta y sobre todo estaban sus ojos, la forma de ver de la más joven estaba vacía de esperanza en contraste con la de su versión mayor.

- El tiempo no ha sido bueno con nosotras - Susurro la emperatriz tras un par de segundos, acariciando la mejilla de la Luz mayor - Por cuantas cosas has pasado en estos últimos años.

Luz sonrió y tomo la mano de la menor - Son casi dos décadas de eventos - Respondió mientras apretaba con suavidad la mano de la emperatriz - Pero no puedo contarte de ello, tu debes de esperar por el momento en que lleguen a ti, eres fuerte y valiente, lo se. - Declaro - Nuestra vida en este punto solo se está escribiendo.