VII: La propuesta

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(Atenas,616 a. C )

—Falta poco para el parto— informa Selene acariciando su vientre, Arzawa siempre trataba de olvidar la edad que tenía Selene,pues cada vez que pensaba en ello tenía arcadas de ver que estaba embarazada ya.

Selene se había casado con un buen hombre,trabajador en un puesto donde vendía tarros de cerámica que él mismo hacía y decoraban,nunca levantaba la voz,nunca pegaba a su mujer,sin deudas, solo que Selene no le amaba y él a ella tampoco, pero ambos cumplían  su deber.

—¿Qué tal le va el negoció?— curiosea Arzawa mientras terminaba de lijar una madera

—Bueno, últimamente vamos justos— vuelve a acariciar su vientre—la crisis nos afecta a todos— divaga suspirando

—¿Vas bien para el parto?— se preocupa,parando un momento para mirar los ojos cansados de Selene,como si llevara una vida entera luchando,pero tan solo era una cría.

—Hacemos esfuerzos en ahorrar.— aunque intenta disimular,su tono preocupado se escapa entre sus palabras.

—Sí necesitas ayuda,puedes pedirla

—¿En serio? ¿A quién? ¿Tú?

—Por ejemplo

—¿Y con qué monedas? Ambos sabemos que no tienes nada— y aunque sonará cruel era verdad,no tenía nada,ni siquiera una joya de su madre para vender, lo único que tenía era su cuerpo, porque ni si quería la túnica era suya.

Era triste saber qué no eras más que la pertenencia de alguien,pero Arzawa ya no se lamentaba,tomaba acción.—Podría ayudar a tu esposo en el negocio,mano trabajadora gratis

—Arzawa, de verdad que te lo agradezco pero…—

—No, Selene— le corta —Tienes razon,no tengo con que ayudarte económicamente pero te puedo ayudar a sacar más beneficio del negocio

—No puedo pedir que hagas eso— réplica apartando mechones de pelo que caen en su frente

—No me lo estás pidiendo,te lo ofrezco yo

—Arzawa— susurra apenada

—Selene,piénsalo, ¿Vale?

—Vale,lo pensaré— promete ella.

—Perfecto — zanja Arzawa con una sonrisa de boca abierta

—¿Y qué tal tu con…? Bueno,ya sabes quién— le pregunta con una sonrisa pícara, cómplice. Arzawa hacía unos meses atrás le había confesado a Selene el beso,esperando ser juzgado o una réplica,pero encontró apoyo.

La única que lo sabía era ella.

—Desde ese beso,no ha habido más,es como si volviéramos a empezar, ¿Sabes?

Arzawa realmente estaba frustrado ante ello, él honestamente pensó que después de ese beso, todo iba a cambiar, pero fueron ilusiones que se esfumaron antes de que apenas pudieran crecer, Arzawa no se atrevía a volver a acercarse tanto a Megacles,tenía miedo de que ese beso fuera solo resultado de un error.

Por otra parte Megacles no era capaz de volver a besar a Arzawa,pues el pensaba que ese beso se lo había dado solo porque él era el señor de la casa,que realmente no quería besarlo,y se había visto obligado a ello.

—¿Hablaste sobre ello con él?

—No

—¿Piensas hacerlo?

—Sinceramente creo que no,si él no saca el tema yo menos.

—Mira hablando del señor— avisa Selene mirando por detrás de Arzawa,en unos segundos aparece Megacles con una sonrisa brillante.

ARZAWADonde viven las historias. Descúbrelo ahora