Capitulo 32: La Rubia.

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NOTA IMPORTANTE, FAVOR DE LEER.

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I: Capítulo 32

POV DERECK


Me acerqué a la barra en busca de una bebida, estaba cansado por el juego de hoy, y no había mejor manera de despertar que una cerveza, bueno, tal vez un café, pero no pediría eso aquí.

— Una cerveza por favor— pedí. El barman obedeció y segundos después me encontraba recorriendo la habitación un poco más despierto.

Una chica morena se encontraba mirándome con una sonrisa coqueta sentada en el sillón. La escaneé de arriba abajo, realmente se veía caliente con ese vestido negro ajustado que remarcaba sus atributos. Le guiñé el ojo y ella lo tomó como una señal para acercarse.

—Hola guapo, ¿me llamabas?—

— Si, emm, ¿quieres bailar?—

— ¿Y si mejor hacemos otras cosas?— Reí por su entusiasmo por llevarme a la cama.

— Por ahora bailemos— tomé su cintura y la atraje a la pista de baile.

La canción que sonaba era una movida el cuerpo de ella se movía al ritmo de la música, pero aunque al verla podía admitir que era hermosa no era mi tipo de chica, ella era demasiado fácil de conseguir, podía estar con Caroline un rato, pero estaba seguro de que también me aburriría fácilmente.

— Voy al baño guapo. Regreso en un instante, espérame— asentí y antes de irse me dio un beso en el cuello.

Salí un momento del montón de gente que se agrupaba en la pista y al hacerlo una chica chocó contra mí tirándome su bebida encima.

— ¡Oh vaya! Gracias por tirar mi bebida, tendré que ir por otra— me reclamó molesta.

— Eres tú la que no se fijó por dónde caminaba, manchaste mi camiseta rubia.

— No me llames rubia– me advirtió mientras sus ojos me lanzaban dagas.

— ¿Qué harás al respecto rubia?—.

No me respondió y se fue dejándome con la palabra en la boca y una camiseta manchada. Caminé hasta el baño olvidándome de Caroline. Ya adentro de éste me quité mi camisa de cuadros dejando solamente la básica blanca que traía abajo. Lo cierto era que esta marcaba mis músculos bien formados a causa del entrenamiento físico que recibía.

Al salir fui por otra bebida y me dirigí a la habitación en dónde siempre jugaban a la botella, necesitaba un poco de diversión, y que mejor que besar a unas cuantas chicas que no esperaban nada a cambio de un poco de ti.

Como era de esperarse un grupo de chicos formaban un círculo con la botella girando en medio, al único que conocía era a Fred Carson, un chico que compartía conmigo algunas clases avanzadas.

Me senté y uní al juego.

La botella giraba. Esta versión consistía en que tenías que besar a la persona que te tocaba en el otro extremo, y tenías la opción de elegir un reto si no lo hacías por alguna razón.

— Carly, como has elegido reto, tienes que quitarte la blusa y quedarte en sujetador todo el juego.

Ella asintió y rápidamente quedó sin blusa, ella realmente tenía unos pechos enormes, entendía por qué la habían retado a eso.

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