𝐄𝐯𝐢𝐭𝐞𝐫𝐧𝐨 || 𝑄𝑢𝑒, ℎ𝑎𝑏𝑖𝑒𝑛𝑑𝑜 𝑐𝑜𝑚𝑒𝑛𝑧𝑎𝑑𝑜 𝑒𝑛 𝑒𝑙 𝑡𝑖𝑒𝑚𝑝𝑜, 𝑛𝑜 𝑡𝑒𝑛𝑑𝑟á 𝑓𝑖𝑛.
Nazaria, una adolescente energética y amable, bondadosa con todos y que siempre busca alegrarle el día a cualquiera que lo necesitará.
Ne...
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Nazaria
—— Veo que ya conocieron a nuestros perros guardianes.—la voz de un mujer hace que la atención del grupo se dirija a ella—
Era morena, pelo muy corto castaño y bajita.
—— Si. Muy bonitos tus perros guardianes.—contesto de forma sarcástica—Mis respetos al que tuvo la idea.
La mujer, de nombre desconocido, se acerca a nosotros por un camino. No tenia miedo de que los cracks le hiciera algo, ya que estaban atados de una forma que impedía eso.
—— Lucen fatal.—comenta al ver nuestro aspecto—
Debía admitir que no estábamos en nuestras mejores pintas.
—— Vengan. Síganme.—vuelve a hablar, dándose vuelta para irse—A menos que quieran quedarse aquí con ellos.
—— No gracias. Estas cosas dan miedo.—respondo rápidamente, siendo la primera en seguir a la desconocida—
—— Nazaria.—la voz de Newt hace que me de vuelta y lo vea—
—— Vamos.
Sin más remedio, todos me siguen. Pasando por el mismo camino que la mujer.
Luego de caminar por unos minutos, la mujer corre una puerta y entra, siendo seguida por nosotros.
Al entrar, vemos que era una fábrica abandonada, adornada con luces y muchas personas.
—— Vamos, no se queden atrás.—pide la chica—
—— Este lugar me da mala espina.—comentó en voz baja—
—— Creí que era la única.—concuerda mi mejor amiga—
—— Jorge quiere conocerlos.
Seguimos caminando y subirnos por una escalera, bajo la mirada de algunos.
—— ¿Quién es Jorge?—le pregunta Thomas a la morena—
—— Ya verán.—le contesta al verlo por unos cortos segundos—Hace mucho que nadie sale del Desierto. Tienen curiosidad.—mira a Thomas de arriba a abajo—Y yo también.
Eso no pasó desapercibido por Teresa ni por mi, sinceramente pensaba que iba a ver guerra entre las dos chicas por el corazón del joven Thomas.
—— Tremenda historia me mandé.—comentó para mi misma—
Newt me coloca un poco más adelante de él. Haciendo que lo vea extrañada.
—— Solo camina, Naza.—me pide el rubio—
Lo que yo no sabía era que el hombre detrás nuestro me veía de una forma no muy linda que digamos.
—— ¿Tienen un mal presentimiento sobre este lugar?—pregunta Newt viendo alrededor—
