Balas, fuego, bombas...
Se escuchan estruendos,
bajo cada ladrillo del suelo,
de quienes temen por sus vidas.
Se escuchan gritos de auxilio,
llantos, pidiendo piedad.
Las balas, traspasan cuerpos que aún no crecen;
las bombas, arrasan sueños
que apenas se están formando.
El fuego, arrasa todo lo que un día tuviste
y viste esa barbarie aunque no quisiste.
Estás tratando de luchar por tu vida en medio
de una pelea que no es tuya.
La sangre corre por las calles;
la muerte está presente esperando llevarse
a cualquiera que se le pase en frente.
Niños que no hablaban, comienzan a hacerlo,
pero solo dicen tres palabras, "no me mates"
¿Pero quién se atrevería hacerlo?
Solo almas despiadadas con sed de venganza,
inclusive, pueden que sean almas pérdidas,
que no tienen opción.
La mirada de un niño, de un hombre, una mujer,
un anciano justo cuando el tirano arremete,
se sumerge en agonía, antes de conocer la malicia.
Balas, fuego, bombas...
Se repite la historia.
No sabemos vivir en paz.
Somos animales que solo
piensan en sí mismos.
Desde tiempos remotos, no hemos encontrado
la forma de establecer un vínculo...
Y los que existen, terminan en sangre.
Balas, fuego, bombas...
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CENIZAS DEL CREPÚSCULO
Puisi"Cenizas del Crepúsculo" no es solo un reflejo de la oscuridad que acompaña al final del día, sino una meditación sobre los elementos que conforman la experiencia humana en su forma más dolorosa y auténtica. En este espacio liminal entre la luz y la...