𝐀𝐦𝐨𝐫𝐢𝐨𝐬 𝐝𝐞𝐥 𝐕𝐨𝐥𝐞𝐢𝐛𝐨𝐥 || ʜᴀɪᴋʏᴜᴜ!!

|07|

- ¿Emiko?

Hazuki zarandeó un poco su hombro y al no recibir respuesta, la puso boca arriba.

Todas se quedaron sin habla al ver que de su frente había sangre y se esparcía por su rostro.

-Debes estar bromeando - se puso en pie rápidamente para ir a la entrada luego de dejar bien acomodada a la castaña en el suelo - ¡Cuídala mientras tanto, iré a buscar a un profesor!

- ¡Saito, espera!

Pero ya se habían ido. Y se mantuvieron alrededor de la castaña, viendo si llegaba a despertar. Y para que estuviera más segura, Michiyo apoyó su cabeza en sus muslos.

La morena miraba de un lugar a otro viendo si lograba a ver un profesor cerca, y como no llegó a ver a nadie no tuvo más remedio que ir a ver si había alguien cerca en el otro gimnasio.

- ¡Profesor Takeda! - exclamó al ver que sí se encontraba allí.

Todos voltearon a ver a la entrada, donde estaba ella tratando de recuperar el aire.

- ¿Sucede algo Saito-kun? - preguntó este para acercarse a ella.

- ¡Sí! - tomó aire - ¡Es Emiko, tuvo una caída y comenzó a sangrar! - en sus ojos se pudo ver la clara preocupación que tenía - ¡Y no sabemos que hacer, por eso vine a buscar a alguien!

-Está bien, pero necesito que te tranquilices - habló tratando de calmarla - Ahora, llévame a donde está ella.

- ¡Sí! - volvió corriendo a la entrada - ¡Está en el otro gimnasio!

Y sin avisar, se mandó a correr de regreso a donde vino.

- ¡Pero espera! - y el profesor fue tras ella, tratando de alcanzarla.

Los chicos, que les picaba la curiosidad por saber lo que pasaba al ver la palpable preocupación que había demostrado la morena, quisieron ir a ver. Y como Ukai se había ido junto con Takeda, decidieron ir de todas formas al no tener la supervisión de nadie.

Y al solo haber escuchado la parte de sangrar y caída, no sabían a quien le sucedió eso. Ahora entendían porque la alteración de Saito.

- Hazuki, ¿qué fue lo que pasó?

-Oh, Sugawara-san - dijo al notar la presencia de los chicos en la entrada - Lo que pasó fue que Emiko se había chocado en el tubo de la red, - señaló a lo que nombró - y parece que también con el piso.

- ¿Pero fue algo grave? - preguntó Hinata sobresaliendo por su cabello.

-No te preocupes, solo fue una de las tantas caídas que llegó a tener en su vida- sonrió un poco al rememorar lo que decía.

Pero debería a empezar a preocuparse más por la torpeza que puede llegar a tener su amiga.

- ¿Tan normal es que se caiga seguido? - esta vez quien preguntó fue Tanaka.

-Sí, raro pero cierto - rió con un poco de nerviosismo - Hasta se podría decir que siempre que le pasaba algo a ella luego me pasaba algo a mí también - al soltar aquel comentario, hizo que algunos se llegaran a preocupar por ella.

Lo más normal, es que le pasara algo peor.

-Pero eso pasa muy pocas veces - oír eso hizo que algunos soltaran el aire al instante

- Espera, pensaron que a mí me podría pasar algo peor, ¿verdad?

-Sí - respondieron todos a la par.

-Me ofenden porque hubieran pensado que yo podría correr más peligro, pero lo dejaré pasar. Ahora fuera de aquí que aún tengo que entrenar - comenzó a mover su mano en señal de que ya se podían ir.