Lev:
Los grandes portones de hierro me reciben tan pronto detengo el motor en la entrada. Y con un pie apoyado en el concreto, tamborileo los dedos en el manillar de la motocicleta esperando; el guardia que se acerca corriendo para abrir la reja se ve agitado y nervioso mientras se disculpa cuando levantó la visera del casco y lo miro arrugando el ceño.
—¿Todo en orden?—Pregunto y asiente.
—La señora.
—¿Otro paseo nocturno?—Indago y asiente.
Niego con la cabeza y bajo la visera del casco volviendo a acelerar el motor cuando las hojas de la reja se abren frente a mi.
La mujer de Sasha es una chica agradable, pero cuando su mente se pierde, se vuelve una amenaza demasiado peligrosa. Incluso con sus cinco meses de embarazo. Varios guardias lo han comprobado a las malas, cuando un escolta intento regresarla a la casa en medio de la madrugada, ni siquiera llego a tocarla pero ella casi lo mata, para su suerte solo acabo recibiendo una puñalada con un pica hielos. Pero sumando a que Goliath no permite que nadie se le acerque, es difícil monitorearla, a menos que quieran terminar siendo devorados por el tigre de 300 kilos, por lo que cuando se desorienta, acaban llamando a la única persona capaz de calmarla. «Sasha»
“—Será padre ahora y ya está demasiado cargado de trabajo, como para agregarle una carga más...”
Me detengo junto a un árbol y me quito el casco que cuelgo de mi brazo mientras saco la caja de transporte sujeta en la parte trasera de mi motocicleta, abro la rejilla y tomo al pequeño peludo que lloriquear y menea la cola lamiendo mi mano cuando lo tomo con una mano y lo acomodo en mi brazo. Observo la hora en el teléfono y marco el número de Kat, la línea suena pero no responde, así que vuelvo a insistir hasta que al tercer tono, responden.
—Hol…
—¿Donde estás pequeña bambi?
—En casa de Sashi… creí que lo sabías, voy a pasar la noche aquí.
—Lo se, pero me refería, a dónde exactamente.
Por un momento no responde y vuelvo a mirar el aparato en mi mano antes de llevarlo a mi oído otra vez.
—Oh. Emmm… no podía dormir, así que salí a tomar aire. Estoy en el jardín. ¿Por qué? ¿Paso al…
—Bien.
Corto y deslizo el aparato en mi bolsillo mientras comienzo el trayecto hacia el jardín trasero. El cielo nocturno permanece estrellado y la brisa es tan suave que la copa de los árboles a penas se mecen levemente como una suave melodía.
Recorro con la mirada el lugar estrechando los ojos, hasta que en la lejanía encuentro a la persona que buscaba. Está de espaldas, sentada en un columpio que cuelga de la rama de un gran árbol viejo. El cabello castaño le cae libre tras la espalda y sonrío al ver que sus pies a penas llegan al piso, fijo la mirada en como se empuja con la punta de las pantuflas moviéndose de adelante hacia atrás de forma juguetona he inocente y vuelvo a sonreír.
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El Corazón del Mafioso © Libro#2 Serie "Almas Rebeladas." [SIN CORREGIR]
Romance-Vuelve a casa pequeña bambi. -Dice dejando salir un suspiro, elevando la mirada hacia el cielo. No respondo, y el tampoco se voltea cuando tomo asiento a su lado, apoyando el peso de mi cuerpo sobre las palmas de mis manos. Elevo la mirada en la m...