¿Quién podría imaginar que el macho alfa más, serio y adinerado se vería atrapado por los encantos de un tierno omega? Pero este no es un omega cualquiera; se trata de uno verdaderamente singular. No es que posea un poder extraordinario, sino que su...
Todos los presentes se levantan de su lugar hacen una reverensia a jeon y salen de la sala
Risien llegó un hombre me entrego la caja y me dijo que te diga... que te diga que.... _ lisa suspira para proseguir _ luis te da sus condolencias _ jeon confundido agarra la caja, _ también me dio una carta, jeon agarra la carta y comienza a leerla ...
..._ jeon suelta la carta y abre la caja le levemente, en su rostro solo mostraba el miedo por ver lo que contenía dentro, su lobo alerta de cada movimiento comienza a oler el aroma que salía de esta_
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Al abrir la caja, Dentro se encontraban 3 bolsas dos pequeñas y una más grande, jeon agarra primero la más pequeña y al tenerla es sus mano su cuerpo siente como una corriente eléctrica pasara
y su lado animal sintió el aroma de su Omega, igual que jungkook, este con sus manos temblando comenzó a abrir la bolsa en susn manos... lisa La cual analiza casa movimiento de jeon, persive el aroma de jimin
En el momento en que jeon desprendió la bolsa y esta se abre y ve algo que por primera vez odio, mejor dicho le causó miedo
Auuuu_ su lobo dio un aullido de dolor al ver dedos completamente cubierto de Sangre junto con el aroma de su Omega _ jeon mi omega! MI OMEGA JEON!! LO MATARON!!
Lisa al escuchar el grito, llanto del alfa se acercó y le arrebato la bolsa viendo los dedos junto con un anillo el cual era se jimin, soltó la bolsa y empieza a abrir las otras, e igual tenia partes del cuerpo y aroma de jimin,
lisa dirige su mirada a jeon el cual no se movía y solo miraba sus manos cubiertas de la sangre de su omega,
Jeon—susurra lisa, asustada por lo que estará sintiendo el alfa—lo sien/
¡Cállate! —grita Jeon, sus ojos fijos en Lisa. Ella retrocede, asustada al ver que sus ojos brillan con un tono rojizo, como si la furia y la sangre fluyesen a través de ellos. En su mirada solo hay ira—¡Cállate, Lisa! —vocifera con rabia, sintiéndose controlado por su lobo interior, que suplica manifestar su furia para ahogar el llanto que le consume—¡Mi omega no está muerto!
En un arrebato, agarra el cuello de Lisa, apretándolo con cada vez más fuerza, como si intentara borrar las palabras que ella ha pronunciado—¡No digas estupideces!
—J-Jeon, suéltame, por favor —exclama ella, luchando por respirar, las palabras entrecortadas por los jadeos que le produce la falta de aire—Nochu, suéltame, por favor.
Cuando el alfa se disponía a atacar, Jeon tomó el control de la situación y dejó en libertad a Lisa. Esta, sintiendo la adrenalina correr por su cuerpo, intentaba regular su respiración mientras luchaba por mantener la calma.
Lisa exhaló lentamente y, entre susurros, se alejó de la figura imponente del alfa, intentando encontrar las palabras adecuadas para enfrentar la delicada situación.
