Oportunidades Destinadas [Billie Eilish]

37- Segura

Una vez jueves las cosas tuvieron que volver a la normalidad, mi tía tenía demasiadas cosas que hacer y yo tenía que volver a la escuela. Tenía planeado que volvería el lunes pero todo el caos no lo permitió.

-Llegamos linda.- me avisa mi tía, ella se ofreció hoy a traerme a la escuela lo cual fue un gesto lindo.

-Gracias tía, nos vemos.- antes de salir, ella toma mi rostro entre sus manos y deja un delicado beso en mi frente.

-Nos vemos.- me sonríe y una vez que salgo de la camioneta ella se marcha.

Ya dentro de la escuela camino en dirección a mi casillero, cuando estoy a punto de llegar ahí, me encuentro con ella, apoyada en los casilleros mientras me sonríe. Mi estómago dió un vuelco cuando la vi y de inmediato una sonrisa apareció en mis labios.

-Hola- la saludo tímidamente, sintiéndome nerviosa bajo su mirada.

-Te estaba esperando.- me da una sonrisa ladina y se acerca más a mí.

-¿En serio?- ella asiente acercando su rostro poco a poco.

Mi respiración se acelera por los nervios, ella sella nuestros labios de manera tierna y toma mi mejilla para acercarme más a ella, me siento desfallecer en ese momento y de manera automática mi cuerpo se une más al suyo, provocando que su mano libre vaya a mi cintura sosteniendome junto a su cuerpo. Ella se separa y un suspiro sale de mis labios.

Nunca nos habíamos besado en público.

-Wow...- digo apenas, ella suelta una suave risa.

-Tengo que ir a clase, te veo luego.- vuelve a acercarse y deja otro beso en mis labios.

-¿Tan rápido?- digo casi como una queja.

-Sí, tengo que irme, pero quería verte antes, te veré en un rato, te amo.- acaricia mi mejilla y sin dejarme responderle se va.

Busco mis cosas en el casillero y yo también me retiro a mi clase.

Ya es hora del almuerzo, así que camino por los pasillos con intenciones de encontrarme con mi ojiazul. Hace algunos meses yo no duraba en la escuela hasta el almuerzo, estaba por ahí con mis amigos, ahora mismo no sé que hacer, como ya he dicho antes, no tengo muchos amigos en la escuela.

Mientras camino, puedo enfocar a Billie a algunos cuantos metros de mí, así que camino con más prisa hacia ella. Cuando estoy a punto de acercarme varias personas que no había notado antes se atraviesan, frunzo el ceño y entonces los reconozco; son los amigos de Billie y alguien más...

-¿Qué mierda?- oigo a la ojiazul hablar.

-Oh no, tú no.- habla una rubia en mi dirección.

-¿Disculpa?- suelto desconcertada.

-Aléjate.- ordena nuevamente y mi rostro simplemente se distorsiona en confusión.

-Yo vine con Billie, no contigo.- respondo secamente, pero la castaña a su lado se aferra a la muñeca de la Billie, haciéndome rechinar los dientes.

-Mierda Odessa.- se queja de nuevo la ojiazul.

-Billie, puedes salir de tu barrera y venir conmigo, por favor.- hablo ignorando a las cuatro personas asesinandome con la mirada.

-Ya háganse a un lado.- ella forcejea y finalmente aparece frente a mí.

-¿Crees que eres su dueña o algo así?- oigo a la castaña quejarse mientras se acerca.

-¿Perdón?- la miro con el ceño fruncido y ella revira los ojos.

-¿Eres idiota? Mejor déjala en paz, lo único que harás es arruinarla, igual que tú.- tenso la mandíbula, tomando una larga respiración para tomar toda la paciencia que puedo.