Oportunidades Destinadas [Billie Eilish]

20- Defenderla Del Mundo

Sábado, domingo, lunes, martes, ¿Dejé de ir a buscarla? No. ¿Las cosas están mejor? No. El hombre no volvió a darme más cartas, no volví a saber nada de ella y nada ha mejorado en una mierda, ¿Dejaré de ir a buscarla? No.

- Hola, ¿Señorita O'Connell?- pregunta alguien delante de mí regresandome a la realidad. Levanto la mirada, algo descolocada, la maestra de filosofía de _______.

- Um... Sí, soy yo.- le doy una sonrisa forzada.

- ¿Sabe algo de ______? No ha venido a clase.- suspiro sintiendo un nudo en mi garganta.

- Ella... No la dejan asistir a la escuela.- respondo secamente.

- ¿Cómo que no la dejan? ¿Le importaría explicarme?- siento un ardor en el pecho y el nudo en la garganta ya común vuelve.

- Está pasando por algo difícil y no la dejan venir a la escuela, por favor, no la expulsen, juro que volverá.- casi le suplico.

- Tranquila, ¿Hay algo que se pueda hacer?- pregunta con preocupación.

- Sólo diga al director que no la expulse, ella volverá a la escuela.- digo con la voz apagada.

- Espero que todo se arregle.- acaricia mi hombro, yo sólo asiento y me voy.

Doy un largo suspiro y siento las lágrimas amenazar con salir de mis ojos, me duele el corazón, físicamente, siento dolor en mi corazón, corazón que ya es de ella. Las ojeras están cada vez más visibles en mi rostro, eso me hace ver más deprimente de lo debido, he pasado las últimas noches sin dormir, pensando en si está bien, si le habrá pasado algo que no mencionó o si ahora mismo la están lastimando, qué puedo hacer para ayudarla.

Dentro de todo esto, la tristeza, el miedo y la soledad, descubrí que estoy enamorada de ella y lo estoy demasiado, jamás estuve tan enamorada de nadie. Ahora mismo siento que la amo y la necesito más que nunca.

- ¡Billie! ¡Billie espera!- escucho la voz de Zoe detrás de mí pero no me detengo. - ¡Billie!- se posiciona delante de mí y entonces me obliga a detenerme.

- ¿Qué pasa Zoe?- respondo limpiando mis lágrimas.

- ¿Estás llorando? ¿Qué sucede?- niego con la cabeza. - Oye habla conmigo, ¿Ya te olvidaste de nuestra amistad?

- Te lo advertí, Zoe.- respondo de mala gana.

- Lo siento, ya no hablo con él, Billie ¿Quieres volver a ser mi amiga, por favor?- baja las cejas.

- Claro, Zoe. Te veo después.- respondo sin más y pretendo seguir caminando pero ella vuelve a detenerme.

- Estás así por ella, ¿Verdad?- me da una mirada compasiva y vuelvo a sentir un nudo en la garganta.

- No la dejan salir de casa, Zoe. Me la quitaron, ni siquiera la dejan venir a la escuela o salir de su habitación.- sin poder evitarlo más rompo en llanto, ella simplemente se mantiene en silencio.

- Fuimos nosotros, Billie.- confiesa de repente, limpio mis lágrimas y la miro con el ceño fruncido. No...

- ¿A qué te refieres?- pregunto, esperando a que no sea lo que creo.

- Nosotros le dijimos a sus padres que estaban saliendo y donde estaban, Elian fue el que llamó a tu hermano para decirle donde estabas.- estoy perpleja, en shock, ¿Mi mejor amiga? ¿Mis amigos?

- ¡¿Qué mierda te sucede?! ¡¿Qué les sucede a todos ustedes?! ¡Son idiotas! ¡No sabes lo que ocasionaste! ¡Todos ustedes! ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué mierda harías eso?!- grito sin importar que todos me miren.