Capítulo 52: Crisis

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Eda hizo la pregunta para distraer a Fawley mientras lanzaba hechizos sin descanso: hechizos aturdidores, maldiciones explosivas, hechizos vinculantes y muchos más, todos lanzados contra él sin dudarlo.


Varió estratégicamente los ángulos desde los que lanzaba los hechizos y, al mezclar el orden en el que se lanzaban, le causó bastantes problemas a Fawley.


Podía bloquear algunos hechizos directamente, pero otros, debido a sus ángulos complicados, lo obligaban a esquivarlos con movimientos físicos. Incluso tuvo que rodar por el suelo para evitar el hechizo final.


El fuego de ametralladora de hechizos siempre había sido el objetivo de Eda. Si un solo golpe podía derribarlo, eso sería ideal. Si no, entonces confiaría en una potencia de fuego abrumadora. Al bombardearlo con una andanada de hechizos, uno estaba destinado a impactarlo, apuntando a una supresión total.


Fawley ahora parecía un poco desaliñado. Su túnica estaba cubierta de hojas caídas y su rostro tenía algunos rasguños, lejos del elegante y agraciado profesor que alguna vez fue.


Pero esa versión refinada de Fawley había desaparecido hacía tiempo. Desde que la maldición había comenzado a hacer mella, Fawley había estado miserable y enfermizo, sin nada del encanto que había mostrado al principio del año escolar.


Después de sacudirse las hojas de su túnica, Fawley agitó su varita nuevamente, convocando otra explosión de llamas.

El fuego rodeó a Eda y las llamas abrasadoras la atacaron repetidamente. Eda tuvo que agitar frenéticamente su varita para apagar el fuego con su magia, evitando que las llamas la quemaran.


"Al principio solo quería darles un mal rato a Dumbledore y a su perro faldero Snape, pero se atrevieron a interponerse en mi camino. ¿Cómo podía dejar que me vieran salir con una sonrisa?" dijo Fawley. "Han estado vigilándome, incluso después de que me fui, todavía en guardia. Así que decidí darles una lección"


Fawley observó a Eda, que seguía resistiéndose con todas sus fuerzas, y una sonrisa inconsciente apareció en su rostro. "Pronto terminará, muy pronto"


¿No es esto una matanza sin sentido?


¡Tu decisión es demasiado apresurada!


Solo te estás metiendo conmigo porque soy fácil de intimidar, ¿verdad? Eda disparó mentalmente tres preguntas seguidas.


"¿Entonces me elegiste? Porque según tú, descubrí tu secreto y te estaba investigando", dijo Eda, reuniendo su energía mágica. Esto aún no había terminado. "Incluso si me matas, no te beneficiará. Aún no encontrarás lo que estás buscando"


Las llamas, que aún ardían bajo el control de Fawley, no mostraban signos de extenderse más. La supresión de Eda estaba funcionando.


Mientras observaba a Eda luchando por sobrevivir en el fuego, Fawley se burló: "¿Estás pidiendo clemencia? Eres el alumno preciado de Snape, ¿no? ¡Pareces tan débil como él!"


"Un estudiante al que le gusta escabullirse por la noche se aventura al Bosque Prohibido, tropieza accidentalmente con la guarida de una araña y es devorado vivo por las arañas que residen allí. ¿Qué tiene todo esto que ver con el pobre Fawley, que ya ha dejado la escuela?" Fawley continuó, su tono burlón.

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